sábado, 7 de octubre de 2023

Saber Vivir

 Habitar la tierra, ser justos y buscar a Dios

 “A partir de una sola persona, hizo a toda la gente del mundo, y a cada nación le dijo cuándo y dónde debía vivir. Dios hizo esto para que todos lo busquen y puedan encontrarlo”, Hch 17:24-28

¿Qué quería Dios para la vida humana? ¿Cómo quería que el ser humano desarrollara la vida? Es decir, el ser humano en la relación con él, en las relaciones dentro de la comunidad y la relación con el resto de la creación. Dios hizo al ser humano para que tuviera una relación con él. El ser humano también fue creado para vivir en comunidad. La imagen de Dios es el ser humano en comunidad, es decir la imagen de Dios es comunitaria. La vida del ser humano no puede ser buena a menos que se viva en comunidad. Dios también hizo al ser humano para vivir en armonía con su creación. La administración de la tierra fue la gozosa responsabilidad del ser humano y ¡la tierra cooperaba! Dios quiere la armonía en todas las relaciones; en el aspecto religioso, en el aspecto social/político y en el aspecto ecológico. Ofendemos a Dios cuando lo sustituimos o reemplazamos como norma de fe y vida. También se ofende a Dios cuando se acapara la tierra y cuando por esa razón algunos no tienen tierra en que habitar. Hay prácticas injustas que impiden que se cumplan los propósitos de Dios en que la gente sea bendecida, el mal sea derrotado y Dios sea reconocido y adorado. Pablo nos habla que “De una sola persona hizo todas las naciones para que habitaran toda la tierra; … Esto lo hizo Dios para que todos lo busquen y, aunque sea a tientas, lo encuentren”. Habitar la tierra no es solo ocuparla sino cuidar de ella para que siga siendo habitable. Dios nos colocó aquí para habitar la tierra, saber vivir en comunidad y buscarlo a El con todo nuestro ser. Afirmemos nuestra relación con Dios para saber vivir en comunidad y ser justos con la tierra.

Carlos Scott

Foto Gilbert Lennox

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