sábado, 2 de diciembre de 2023

Ver

 Miopía

"Cuando todos estuvimos a salvo, nos dimos cuenta de que nos encontrábamos en una isla llamada Malta. Los habitantes de la isla nos trataron muy bien, y encendieron un fuego para que nos calentáramos, ... Pablo había recogido leña y la estaba echando al fuego. De repente, una serpiente salió huyendo del fuego y le mordió la mano a Pablo. Cuando los que vivían en la isla vieron a la serpiente colgada de la mano de Pablo, dijeron: «Este hombre debe ser un asesino porque, aunque se salvó de morir ahogado en el mar, la diosa de la justicia no lo deja vivir.» Pero Pablo arrojó la serpiente al fuego. Todos esperaban que Pablo se hinchara, o que cayera muerto en cualquier momento, pero se cansaron de esperar, porque a Pablo no le pasó nada. Entonces cambiaron de idea y pensaron que Pablo era un dios.”, Hch 28:1-6

Lamentablemente algunas veces no podemos distinguir o ver bien y esto les paso a los habitantes en la isla de Malta. Cuando ven que Pablo es mordido por una serpiente piensan que está recibiendo su justo castigo por tratarse de un asesino y cuando ven que a Pablo no le pasa nada lo tratan como a un dios. La ecuación Villano - Héroe o al revés sigue reinando en nuestros días. Pablo no es ni un pecador cruel ni un dios. Es un ser humano como cualquiera de nosotros. En la misión encontramos momentos difíciles y los más difíciles es cuando nos juzgan o mal entienden. ¿Qué hacer? Seguir adelante. "Jesús también les dijo: «No se conviertan en jueces de los demás, y Dios no los juzgará a ustedes. No sean duros con los demás, y Dios no será duro con ustedes ...”, Lc 6:36 “A mí, en lo personal, no me importa si ustedes, o un tribunal de justicia de este mundo, se ponen a averiguar si hago bien o mal. Ni siquiera me juzgo a mí mismo. Y aunque no recuerdo haber hecho nada malo, eso no significa que yo esté del todo libre de culpa. Pero el único que tiene derecho a juzgarme es Dios. Por eso, no culpen a nadie antes de que Jesucristo vuelva. Cuando él venga, dará a conocer todo lo que está oculto ...”, 1 Co 4:3-5 “Tengo la conciencia limpia, pero eso no demuestra que yo tenga razón. Es el Señor mismo quien me evaluará y tomará la decisión”, 1 Co 4:4 (NTV)

Carlos Scott

Foto Gilbert Lennox
 

viernes, 1 de diciembre de 2023

Compartir el pan

 Anuncio de Esperanza

“A la madrugada, Pablo pensó que todos debían comer algo y les dijo: «Hace dos semanas que sólo se preocupan por lo que pueda pasar, y no comen nada.  Por favor, coman algo. Es necesario que tengan fuerzas, pues nadie va a morir por causa de este problema.» Luego Pablo tomó un pan y oró delante de todos. Dando gracias a Dios, partió el pan y empezó a comer.  Todos se animaron y también comieron. En el barco había doscientas setenta y seis personas, y todos comimos lo que quisimos. Luego los marineros tiraron el trigo al mar, para que el barco quedara más liviano… Todos llegamos a la playa sanos y salvos”, Hch 27:33-44

Dios preservo milagrosamente las vidas de todos los tripulantes protegiéndoles de la tempestad, el hambre y el naufragio. Pablo, en medio de la difícil situación no se acobardo ante la adversidad y tampoco perdió la esperanza. Dios le envió un ángel indicándole que estuviera confiado en Dios y convencido que estaría frente al emperador para dar testimonio de su fe. Dios salvaría la vida de todos. Sobre esta confianza tomó pan, dio gracias, lo partió e invitó a otros a participar. Esto nos recuerda la comunión o santa cena del Señor. En este tiempo se nos alienta a cuidar nuestra comunión recordando al mundo la esperanza de su propia salvación, del Reino de Dios. Que podamos participar tomando el pan, bendecirlo y partirlo, luego la copa dando gracias y que la vida de la comunidad sea un auténtico anuncio del nuevo orden del Reino. Nos preguntamos: ¿Están todos servidos? El Señor nos anima a compartir nuestra vida con otros para que tengan esperanza y pongan su confianza en el Señor.

Carlos Scott 

Foto Gilbert Lennox

jueves, 30 de noviembre de 2023

Fidelidad

 Una visión de esperanza

“Como habíamos pasado mucho tiempo sin comer, Pablo se levantó y les dijo a todos: «Señores, habría sido mejor que me hubieran hecho caso, y que no hubiéramos salido de la isla de Creta. Así no le habría pasado nada al barco, ni a nosotros. Pero no se pongan tristes, porque ninguno de ustedes va a morir. Sólo se perderá el barco.  Anoche se me apareció un ángel, enviado por el Dios a quien sirvo y pertenezco. El ángel me dijo: “Pablo, no tengas miedo, porque tienes que presentarte ante el emperador de Roma. Gracias a ti, Dios no dejará que muera ninguno de los que están en el barco.” Así que, aunque el barco se quedará atascado en una isla, alégrense, pues yo confío en Dios y estoy seguro de que todo pasará como el ángel me dijo», Hch 27:21-26
Dios le revelo a Pablo que todos los que estaban navegando con él se salvarían y le concede la vida de sus acompañantes. Gracias a la fidelidad de Pablo en la misión los demás se salvan del naufragio. Hay otra historia en la biblia y es la de Jonás quien toma un barco para ir en la dirección contraria a la que Dios ordena. A consecuencia de su infidelidad toda la embarcación peligra, y los tripulantes no tienen otra alternativa que lanzarlo al mar. Una iglesia fiel es esperanza para el mundo, una iglesia infiel se puede transformar en una amenaza. Creemos que hay un futuro distinto, pero el mundo no podrá creernos si no vivimos a partir de esa esperanza. El mundo se puede animar a creer, en la medida que anunciemos y vivamos esta esperanza. Se nos llama a ser un anuncio en palabras y acciones concretas. También la propia vida interna de la comunidad está llamada a mostrar ese futuro distinto que Dios ha prometido. “Así que ahora les doy un nuevo mandamiento: ámense unos a otros. Tal como yo los he amado, ustedes deben amarse unos a otros. El amor que tengan unos por otros será la prueba ante el mundo de que son mis discípulos», Jn 13:34-35
Carlos Scott
Foto Gilbert Lennox

domingo, 26 de noviembre de 2023

Ven y conversa conmigo

 Peligros y consejos

“Era peligroso seguir navegando, pues habíamos perdido mucho tiempo y ya casi llegaba el invierno”, Hch 27:9

Lucas relata el viaje de Pablo de Cesarea a Roma donde le acompañaban el mismo Lucas y Aristarco, un macedonio de Tesalónica. En la primer parte del viaje se resalta el trato amable del capitán Julio. Mas adelante este capitán encontró otro barco de Alejandría que iba hacia Italia y les ordenó subir a ese barco para continuar el viaje. Las condiciones del tiempo no eran buenas para seguir navegando. “Pablo les dijo a todos en el barco: «Señores, este viaje va a ser peligroso. No sólo puede destruirse la carga y el barco, sino que hasta podemos morir» Pero el capitán de los soldados no le hizo caso a Pablo, sino que decidió seguir el viaje, como insistían el dueño y el capitán del barco”. Suele suceder que en el viaje de la vida misma y de cada nación se presentan situaciones difíciles que hay que solucionar. Como comunidad del Reino de Dios tenemos una voz y algo que hacer ante las diferentes situaciones que suelen presentarse. Esta autoridad no se basa en ser expertos en cuestiones de economía, o de política, ecología, salud, sino en tener una visión clara del futuro que Dios tiene prometido para la humanidad, el Reino de Dios. La comunidad seguidora de Jesucristo todavía tiene una palabra del Señor para el bienestar de las naciones. “¡Dios mío, tú bendices al pueblo que te reconoce como Dios! ¡Tú bendices a la nación que te acepta como dueño!”, Sal 33:12 “Mi corazón te ha oído decir: «Ven y conversa conmigo». Y mi corazón responde: «Aquí vengo, Señor», Sal 27:8 

Carlos Scott

Foto de Gilbert Lennox

miércoles, 22 de noviembre de 2023

Enséñame a vivir

 El juego político a costa de la integridad

“Pablo contestó: —Excelentísimo Festo, yo no estoy loco. Lo que he dicho es la verdad, y no una locura. El rey Agripa sabe mucho acerca de todo esto, y por eso hablo con tanta confianza delante de él. Estoy seguro de que él sabe todo esto, porque no se trata de cosas que hayan pasado en secreto”, Hch cap. 25 y 26

El nuevo gobernador Festo parece traer un nuevo estilo político, pero en definitiva no responde con integridad. El tema de fondo es quedar bien con todos y no verse perjudicado. Todo esto a costa de la verdad. El salmo quince nos recuerda lo siguiente: “Dime, Dios mío, ¿quién puede vivir en tu santuario?, ... Sólo quien hace lo bueno y practica la justicia; sólo quien piensa en la verdad y habla con la verdad; sólo quien no habla mal de nadie ni busca el mal de nadie ni ofende a nadie; … sólo quien cumple lo que promete, aunque salga perdiendo; … y jamás acepta dinero para perjudicar al inocente. Quien así se comporta, vivirá siempre seguro”. Pablo siendo inocente y ante la falta de justicia apela finalmente al tribunal del Cesar. Pablo está señalando indirectamente la triste corrupción del Imperio y la necesidad de responder al mensaje que proclama. Hay contradicciones internas en los sistemas y no hay mucho interés hacia los más necesitados de justicia y equidad. Es triste ver el menosprecio, la indiferencia y que las personas sean un objeto de utilidad política. Pablo tiene el poder y la convicción que le da el Espíritu Santo de tal modo que al final de su encuentro es el gobernador y el rey que se encuentran incómodos. Extraño es este poder que hace que un hombre en cadenas confronte a un gobernador y rey. Si bien ellos no están convencidos, se encuentran vencidos. Este mismo poder está vigente porque conocemos quien vive en nosotros. Jesús se hace presente por medio del Espíritu Santo y es el verdadero protagonista de nuestra historia. "¡Dios mío, tú bendices al pueblo que te reconoce como Dios! ¡Tú bendices a la nación que te acepta como dueño!”, Sal 33:10-12 “Dios mío, enséñame a vivir como tú siempre has querido. Tú eres mi Dios y salvador, y en ti siempre confío”, Sal 25:4-5.

Carlos Scott

Foto Gilbert Lennox

martes, 21 de noviembre de 2023

“Y esta esperanza no acabará en desilusión”

“Si” a la Esperanza y un “No” a la desilusión

“Además, trató de hacer algo terrible contra nuestro templo, y por eso lo metimos en la cárcel”, Hch 24

En este relato, Lucas nos presenta una triste realidad de las autoridades. El sumo sacerdote era conocido como un hombre cruel que no gozaba de la simpatía del pueblo. Por otro lado, el gobernador era conocido por su amor al dinero y por su poca conciencia moral. Ante la evidente inocencia de Pablo lo que hace es lavarse las manos, no dictar sentencia y buscar oportunidades para presionar a Pablo que le ofrezca dinero a cambio de su libertad. “Pablo le habló de que tenía que vivir sin hacer lo malo, que tenía que controlarse para no hacer lo que quisiera, sino solamente lo bueno, y que algún día Dios juzgaría a todos. Entonces Félix se asustó mucho y le dijo: «Vete ya; cuando tenga tiempo volveré a llamarte.» ... Dos años después, Félix dejó de ser el gobernador, y en su lugar empezó a gobernar Porcio Festo. Pero Félix quería quedar bien con los judíos; por eso dejó preso a Pablo.” En medio de todo esto, Pablo debe haber necesitado mucha paciencia al estar encarcelado durante dos años. Cuando le escribió a la iglesia en Roma les dice: “También nos alegramos al enfrentar pruebas y dificultades porque sabemos que nos ayudan a desarrollar resistencia. Y la resistencia desarrolla firmeza de carácter, y el carácter fortalece nuestra esperanza segura de salvación. Y esa esperanza no acabará en desilusión. Pues sabemos con cuánta ternura nos ama Dios, porque nos ha dado el Espíritu Santo para llenar nuestro corazón con su amor.” En medio de las dificultades que tenemos en nuestra América Latina por la corrupción que genera hambre, miseria, opresión, injusticia y mucho más, tenemos la presencia del Espíritu Santo que nos permite seguir adelante, nos anima a no claudicar, resistir, tener carácter y esperanza. El Espíritu Santo llena nuestro corazón con amor para seguir anunciando el mensaje del reino de Dios en palabra y obra. “Y esta esperanza no acabará en desilusión”. No te rindas jamás ¡Venga tu Reino!

Carlos Scott

Foto Gilbert Lennox 


lunes, 20 de noviembre de 2023

Derechos

 Ante el poder de turno

“Los soldados que estaban a punto de interrogar a Pablo se retiraron velozmente cuando se enteraron de que era ciudadano romano, y el comandante quedó asustado porque había ordenado que lo amarraran y lo azotaran.  Al día siguiente, el comandante ordenó que los sacerdotes principales se reunieran en sesión con el Concilio Supremo judío. Quería averiguar de qué se trataba el problema, así que soltó a Pablo para presentarlo delante de ellos”, Hch 22:29-30… “A la mañana siguiente, un grupo de judíos se reunió y se comprometió mediante un juramento a no comer ni beber hasta matar a Pablo… Entonces el comandante llamó a dos de sus oficiales y les dio la siguiente orden: «Preparen a doscientos soldados para que vayan a Cesarea esta noche a las nueve. Lleven también doscientos lanceros y setenta hombres a caballo. … Luego el gobernador ordenó que lo pusieran en la prisión del cuartel general  de Herodes”, Hch 23:1-35

Pablo en medio de los conflictos con los religiosos y el poder político de turno supo moverse con astucia. Supo hacer valer sus derechos reclamando lo necesario en el tiempo justo. Algunas veces las autoridades tratan de desentenderse de los problemas de la gente y en especial de aquellos que no tienen oportunidad de hacer valer su justa causa. “Habla a favor de los que no pueden hablar por sí mismos; garantiza justicia para todos los abatidos. Sí, habla a favor de los pobres e indefensos, y asegúrate de que se les haga justicia”, Pr 31:8-9. “Declárame inocente, oh Señor, porque he actuado con integridad; he confiado en el Señor sin vacilar. Ponme a prueba, Señor, e interrógame; examina mis intenciones y mi corazón. Pues siempre estoy consciente de tu amor inagotable, y he vivido de acuerdo con tu verdad”, Sal 26:1-3

Carlos Scott

Foto Gilbert Lennox

viernes, 17 de noviembre de 2023

Una palabra

 “Ten ánimo”

“Como el conflicto se tornó más violento, el comandante tenía temor de que descuartizaran a Pablo. De modo que les ordenó a sus soldados que fueran a rescatarlo por la fuerza y lo regresaran a la fortaleza. Esa noche el Señor se le apareció a Pablo y le dijo: «Ten ánimo, Pablo. Así como has sido mi testigo aquí en Jerusalén, también debes predicar la Buena Noticia en Roma», Hch 23:10-11

Hay momentos en el seguimiento de Jesús que se generan conflictos. Esto le paso a Pablo y deseaban eliminarlo. Lo único que nos puede sostener en esos momentos es volver a recordar y escuchar nuevamente su palabra que nos da confianza y ánimo para seguir. Todo se trata de confiar y seguir confiando, de bendecir y seguir bendiciendo, de adorar y seguir adorando, de avanzar en contra del mal y derrotarlo haciendo el bien. En los momentos difíciles lo que nos puede sostener es una “presencia”. Es la presencia misma del Señor que está a nuestro lado y nos dice: “Ten ánimo”. “No están peleando contra ti y todo se trata de mi”. “Sigue haciendo lo que te indique y te sostendré”. “Aunque pase por grandes angustias, tú me darás vida; contra el furor de mis enemigos extenderás la mano: ¡tu mano derecha me pondrá a salvo! El Señor cumplirá en mí su propósito. Tu gran amor, Señor, perdura para siempre; ¡no abandones la obra de tus manos!”, Sal 138:7-8. En los momentos muy críticos Dios nos sigue dando una palabra y una visión, Hch 16:9, 18:9-10, 27:22-24. Todavía hay algo que nos queda por realizar, no está perdido y Dios nos da ese ánimo.

Carlos Scott

Foto Gilbert Lennox

jueves, 16 de noviembre de 2023

Misión

 "Te enviaré lejos"

“Los soldados ya iban a meter a Pablo en la cárcel, cuando él le preguntó al jefe de ellos: —¿Podría hablar con usted un momento?... ¿Me permitiría usted hablar con la gente?... Cuando la gente se calló, Pablo les habló en arameo y les dijo: ... "Cuando volví a Jerusalén, mientras oraba en el Templo tuve una visión y vi al Señor que me hablaba: … “Vete; yo te enviaré lejos, a los no judíos” La multitud estuvo escuchando a Pablo hasta que pronunció esas palabras. Entonces levantaron la voz y gritaron: «¡Bórralo de la tierra! ¡Ese tipo no merece vivir!», Hch 21;37-40, 22:1-22

Hay personas que están obsesionadas por cuidar y no arriesgar su posición.  Es el caso de este comandante que no le interesa mucho la verdad y no importa si otros son perjudicados. Lo importante para el era guardar el orden establecido y los que dicen algo diferente al orden existente son “subversivos”. Pablo era visto como un hereje y esto también puede pasar en las comunidades de fe. Se cuenta de tres personas que defendían su ortodoxia, tradición y estructura. Cuando estas personas murieron se presentaron ante el trono celestial para su examen de admisión. El primero salió y dijo: “No pase”, el segundo también salió triste y dijo: “No pase”, pero el tercero ante la divina presencia salió muy contento, diciendo: “No pasó”. Hay personas que solo les interesa resguardar el sistema, la estructura y la institución por arriba de cualquier cambio que el Espíritu de Dios desea hacer. Pablo está dispuesto en contradecir rumores y dar su testimonio, pero declara algo que ellos no pueden aceptar. "Mientras oraba en el Templo tuve una visión y vi al Señor que me hablaba: … “Vete; yo te enviaré lejos, a los no judíos”. Lo importante para el Espíritu Santo no es la estructura de mantenimiento sino la misión. 

Carlos 
Scott

Foto Gilbert Lennox


Abrir los ojos

  Caminar y ser abiertos “Seis días después, Jesús llevó a Pedro, a Santiago y a Juan hasta un cerro alto, para estar solos. Frente a ellos,...