Hacer el bien
"Jesús entró de nuevo en la sinagoga y vio a un hombre que tenía una mano deforme. Como era el día de descanso (sábado), los enemigos de Jesús lo vigilaban de cerca. Si sanaba la mano del hombre, tenían pensado acusarlo por trabajar en el día de descanso.", Mc 3:1-2
La palabra sábado proviene de un verbo usado en el sentido de cesar, de dejar de..., por lo tanto, de reposar. Todos necesitamos descansar y el descanso nos ayuda a renovarnos y darnos cuenta de que todo depende de Dios y no de nuestra velocidad o pasión desenfrenada para lograr resultados. Esto nos agota y nos deshumaniza. Parar y dejar de movernos es un tiempo para descansar, reflexionar, repensar y restablecer una mejor relación con nuestro Dios y nuestro prójimo. Esto está en el plan de Dios, nos da vitalidad, despeja nuestra mente, fortalece nuestro espíritu y obtenemos nuevas fuerzas para seguir en el camino, Gn 2:1-3. Jesús precisa que el descanso no interrumpe la actividad de Dios a favor de la humanidad. "Pero Jesús les dijo: «Mi Padre nunca deja de trabajar, ni yo tampoco.», Jn 5:17. Jesús celebra la vida y hacer el bien es saber festejar cada día. Hacer el bien es el trabajo de amor de nuestro Dios para que podamos celebrar en los días de fiesta. "Ustedes no habrían condenado a mis discípulos—quienes son inocentes—si conocieran el significado de la Escritura que dice: “Quiero que tengan compasión, no que ofrezcan sacrificios” Pues el Hijo del Hombre es Señor, ¡incluso del día de descanso!", Mt 12:7-8. Hacer el bien incluye los días de fiesta y es el trabajo de todos los días.
Carlos Scott
No hay comentarios:
Publicar un comentario