miércoles, 12 de noviembre de 2025

Entiendan bien el gran poder con que Dios nos ayuda en todo. El poder de Dios no tiene límites

Revelación y prueba

“Después de padecer la muerte, se les presentó dándoles muchas pruebas convincentes de que estaba vivo. Durante cuarenta días se les apareció y les habló acerca del reino de Dios.”, Hch 1:3
 
Jesucristo resucitado paso cuarenta días con sus discípulos. Estos cuarenta días son significativos e indican el tiempo de una revelación y de una prueba. Recordamos los cuarenta días de ayuno de Jesús en el desierto antes de su misión. Estos cuarenta días después de la pascua es el tiempo de preparación para la misión de la iglesia: “les habló acerca del reino de Dios”. “Le pido al Dios de nuestro Señor Jesucristo, es decir, al Padre maravilloso, que les dé su Espíritu, para que sean sabios y puedan entender cómo es Dios. También le pido a Dios que les haga comprender con claridad el gran valor de la esperanza a la que han sido llamados, y de la salvación que él ha dado a los que son suyos.  Pido también que entiendan bien el gran poder con que Dios nos ayuda en todo. El poder de Dios no tiene límites; con ese mismo poder Dios resucitó a Cristo y le dio un lugar en el cielo, a la derecha de su trono; con ese mismo poder, Dios le dio a Cristo dominio sobre todos los espíritus que tienen poder y autoridad, y sobre todo lo que existe en este mundo y en el nuevo mundo que vendrá.  Dios puso todas las cosas bajo el poder de Cristo, y lo nombró jefe de la iglesia. Cristo es, para la iglesia, lo que la cabeza es para el cuerpo. Con Cristo, que todo lo llena, la iglesia queda completa.”, Ef 1:17-23 

Carlos Scott

Foto Gilbert Lennox

Una iglesia con propósito - Carlos Scott

“Una Gran Invitación (Mt 11:28-30) con un Gran Mandamiento (Mt 22:34-40) junto a la Gran Comisión (Mt 28:18-20) hacen de una comunidad una Gran Iglesia y de cada persona un Gran Creyente para que exista la continua reproducción de grupos de discípulos y un movimiento de plantación de iglesias en cada etnia.”

» Vengan a mí todos ustedes que están cansados y agobiados (llevan cargas pesadas) ; yo les daré descanso. Carguen con mi yugo y aprendan de mí (déjenme enseñarles), pues yo soy apacible (humilde) y humilde de corazón (tierno de corazón), y encontrarán descanso para sus almas. Porque mi yugo es suave (es fácil de llevar) y mi carga es liviana (la carga que les doy es liviana», Mt 11:28-30

• "—Maestro, ¿cuál es el mandamiento más importante en la ley de Moisés?
Jesús contestó: — “Ama al Señor tu Dios con todo tu corazón, con toda tu alma y con toda tu mente”. Este es el primer mandamiento y el más importante. Hay un segundo mandamiento que es igualmente importante: “Ama a tu prójimo como a ti mismo”. Toda la ley y las exigencias de los profetas se basan en estos dos mandamientos" Mt 22:33-40

“Jesús se acercó y dijo a sus discípulos: «Se me ha dado toda autoridad en el cielo y en la tierra. Por lo tanto, Vayan y hagan discípulos bautizándolos en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo. Enseñen a los nuevos discípulos a obedecer todos los mandatos que les he dado. Y tengan por seguro esto: que estoy con ustedes siempre, hasta el fin de los tiempos», Mt 28:18-20

Discípulos que forman parte de la historia de Dios, hacen historia y cambian la Historia. Saben decir ¡Sí!

«Son muchos los que necesitan entrar al reino de Dios, pero son muy pocos los discípulos para anunciarles las buenas noticias. Por eso, pídanle a Dios que envíe más discípulos, para que compartan las buenas noticias con toda esa gente.», Mt 9:35-38

Sirvamos a nuestra Generación y descendencia

• Dios quiere iglesias fuertes y discípulos de Jesús para que todo el evangelio esté disponible en todo lugar hasta lo último de la tierra

martes, 11 de noviembre de 2025

PRESENCIA: el primer paso para compartir el amor de Dios | Andrés Pérez

La palabra de Dios nos ayuda e indica que no debemos tener miedo

La espiritualidad que hecha fuera el temor 

 “Al verlo, caí a sus pies como muerto; pero él, poniendo su mano derecha sobre mí, me dijo: «No tengas miedo. Yo soy el Primero y el Último, y el que vive. Estuve muerto, pero ahora vivo por los siglos de los siglos, y tengo las llaves de la muerte y del infierno.”, Ap. 1:17-18

Nos encontramos a veces con una pandemia del temor y el texto de la palabra de Dios nos ayuda e indica que no debemos tener miedo. 

Juan se encontraba exiliado en la isla de Patmos, que en esa época estaba casi despoblada y era usada por Domiciano como isla penal. Quizás estaba desanimado al pensar en los problemas de las iglesias. También podría pensar en sus compañeros de servicio que fueron martirizados y otras tantas circunstancias que suelen golpear en la vida.

En el día del Señor cuando Juan no pudo congregarse con los fieles, el Espíritu vino sobre él y Juan vio a Jesús. En los días tristes todos nosotros necesitamos una visitación del Señor.

Juan recibió la revelación de Jesucristo que es un retrato de nuestro Señor. El Señor puso su mano derecha sobre él y le dijo: “No tengas miedo”.

En los tiempos difíciles necesitamos de alguien que nos coloque la mano en el hombro, nos acompañe, entienda nuestro dolor y nos diga: “No tengas miedo”. Dios está en el control. 

Para Pensar: ¿Cuáles son los pensamientos que nos dan tristeza? ¿Cómo estamos experimentando la visitación del Señor sobre nuestras vidas? ¿Qué implica que el Señor nos diga “No tengas miedo”?

Carlos Scott

Foto Gilbert Lennox

lunes, 10 de noviembre de 2025

La formación de discípulos que se reproducen nos lleva al inicio de nuevas comunidades de fe, a la edificación de los creyentes y la madurez en Cristo

Una espiritualidad de cosecha

¿Qué produce la formación de discípulos?, ¿Qué efectos tiene?

La formación de discípulos que se reproducen nos lleva al inicio de nuevas comunidades de fe, a la edificación de los creyentes y la madurez en Cristo. 

Mediante los dones los creyentes sirven en diferentes áreas de la sociedad y esto produce un impacto cultural significativo que glorifica a Dios.

El crecimiento de una iglesia local debe llevar a los discípulos a formar nuevas comunidades.
Los grupos pequeños proveen lo necesario para comenzar una nueva comunidad. Siempre hablamos de la gente y no de la compra de terrenos o propiedades.

También hablamos del sacerdocio de todos los creyentes y no de la jerarquía o el clero. Hablamos de la comunidad del Reino de Dios llegando a otras personas en su idioma, cultura y contexto. 

La formación de nuevos discípulos y la plantación de nuevas iglesias es mucho más difícil en algunas culturas y en regímenes represivos y totalitarios. En algunos casos la comunidad de fe será una iglesia perseguida y sufriente.

Cuando hablamos de iniciar nuevas comunidades de fe no hacemos referencia a las "etiquetas denominacionales", tampoco a la multiplicación de edificios, ni la proliferación de organizaciones eclesiásticas. Lo que menos necesita la iglesia en muchos de nuestros países son más edificios y estructuras eclesiásticas.

Lo que tiene vida crece y se reproduce. Los grupos pequeños que se forman como nuevas comunidades de fe, pueden ser la respuesta a un mundo que necesita creer y tener esperanza. 

A medida que las personas van descubriendo la nueva vida en Cristo y un nuevo estilo de vida, la sociedad y una nación pueden ser transformadas y "celebrar la vida en todas sus dimensiones".

Afirmamos la Misión de Dios y el llamado a su pueblo de bendecir a todas las gentes.

Para Pensar: ¿Qué significa estar en el seguimiento de Jesús y ser pueblo peregrino? ¿Qué impide formar una nueva comunidad de fe? 

Carlos Scott

Foto Gilbert Lennox
 

domingo, 9 de noviembre de 2025

Los seguidores de Jesucristo pueden comenzar nuevas iglesias alrededor de una misión específica. Podemos sugerir el comienzo de nuevas iglesias con grupos pequeños orientados hacia la misión.

Un sentido de dirección en la espiritualidad

La comunidad del Pueblo de Dios debe valorar la necesidad de estructurar la comunidad de manera que sirva más efectivamente como agente del reino, llevando a cabo aquellas tareas "que Dios dispuso de antemano", Ef 2:10. 

Podemos sugerir el comienzo de nuevas iglesias con grupos pequeños orientados hacia la misión. Los seguidores de Jesucristo pueden comenzar nuevas iglesias alrededor de una misión específica. 

Implica personas comprometidas las unas con las otras donde se mantiene la comunión y comunicación. Cada nueva comunidad existe para un propósito específico. 

El estudio de la Biblia, la oración y el compartir son comunes a todos, pero cada nueva iglesia tiene también una misión muy específica para la cual existe y a la cual se dedica.

Estas muevas iglesias pueden ser muy variadas de acuerdo con los dones del grupo y enfocadas en determinadas necesidades. El comienzo de nuevas iglesias permite la diversidad de personalidades y dones espirituales. 

Para Pensar: ¿Qué significa ser iglesia en el día de hoy? ¿Tenemos en mente y prioridad el comienzo de nuevas comunidades de Fe?

Carlos Scott

Foto Gilbert Lennox

La comunidad de fe está llamada a seguir su mandato de hacer discípulos. El nuevo comienzo de una comunidad de fe nos habla de la salvación que Dios provee. La salvación abre la puerta a la bendición.

Una espiritualidad con propósito

¿Porque muchas iglesias no se han reproducido formando nuevas comunidades de Fe?

Muchas iglesias no han iniciado nuevas comunidades de fe simplemente porque no han tenido una perspectiva clara de los propósitos de Dios, su visión y la intención necesaria para llevar adelante este proceso.

El comienzo de nuevas comunidades de fe se debe dar por las razones adecuadas y no por razones equivocadas. Las iglesias locales algunas veces se dividen por el enfrentamiento en el liderazgo y por no tener una visión saludable. 

Este tipo de divisiones y debilitamiento se puede dar por las diferencias en el choque de personalidades, estilos de liderazgo, administración, búsqueda de poder, prestigio, posición, competencia, envidia, celos, inmoralidad, etc. No se ha tenido una visión clara de toda la escritura y su propósito. El modelo no es la torre de Babel sino el espíritu del pentecostés y la llenura del Espíritu Santo

Los propósitos de Dios a través de toda la escritura nos revelan que Dios quiere bendecir a todas las personas, a todas las etnias, a toda sociedad. Dios se ha propuesto derrotar el mal por medio del Reino de Dios y solo Él quiere ser reconocido y glorificado. Él llama a todo su pueblo a participar de su Misión. Jesucristo ha sido declarado Rey y Señor de todo el cosmos. Esta realidad debe ser compartida con toda la humanidad.

La comunidad de fe está llamada a seguir su mandato de hacer discípulos. El nuevo comienzo de una comunidad de fe nos habla de la salvación que Dios provee. La salvación abre la puerta a la bendición.

La bendición es la provisión de Dios para el desarrollo humano tanto espiritual, emocional, físico y material y una nueva comunidad nos trae las buenas nuevas en la persona de Jesucristo. 

Somos desafiados a guiar a todo el pueblo de Dios en el comienzo de nuevas iglesias por las razones apropiadas y no por razones inapropiadas. Nuevos odres para un nuevo tiempo.

Para Pensar: ¿Qué proceso podemos iniciar para que esto sea realidad? ¿Qué implica soltar y liberar a la gente para que pueda ejercer el sacerdocio de todos los creyentes?

Carlos Scott

Foto Gilbert Lennox

viernes, 7 de noviembre de 2025

El llamado a la misión tiene que ver más con la obediencia que con la geografía. En todo lugar suele haber determinados sectores que no han sido expuestos a una presentación del evangelio

 La espiritualidad en la vida misional

¿Qué implicancia tiene una vida misional?

El llamado a la misión tiene que ver más con la obediencia que con la geografía. En todo lugar suele haber determinados sectores que no han sido expuestos a una presentación del evangelio y que no desean un contacto formal con las instituciones religiosas.

¿Qué tipo de servicio alternativo podemos ofrecer a segmentos de personas que están en busca de una espiritualidad diferente que no pase por la jerarquía eclesiástica?

El ser humano entrando en la posmodernidad es algo a lo que debemos prestar atención pensando en nuestro presente y futuro. Las generaciones X, Y, Z y Alfa tienen algo para decirnos a las denominaciones cristianas y su tradición. Muchas personas en estas generaciones miran a la iglesia tradicional como irrelevante, mientras que otros y otras han tenido experiencias negativas o bien ven a las personas como extrañas y lejanas.

Los nuevos contextos nos llevan a buscar odres nuevos para un vino nuevo. A las nuevas generaciones les cae bien Jesús, pero no tanto la iglesia. ¿Qué puede surgir a partir de aquí?

Los acontecimientos que se van desarrollando en la post pandemia nos invita a intentar nuevos movimientos de iglesias.

La década de los años 90 no todos supimos apreciar el anuncio anticipado de lo que sería el "tercer espacio" e iglesia emergente. ¿Qué queremos decir cuando hablamos de un "tercer espacio"? Nuevas comunidades de fe se formaron en cafés, hogares, bares, empresas y otras áreas de la vida comunitaria. A estos espacios neutrales se les llamó el "tercer espacio". Espacios que no serán los nuestros y tampoco el de ellos, sino algo intermedio. Fueron guiadas por el "laos, el pueblo, los laicos". Estructuras de abajo hacia arriba en un liderazgo compartido y no en una jerarquía estática de arriba hacia abajo.

¿Qué necesitamos hoy? Sencillez y movimientos autóctonos podría ser lo primero.

Para Pensar: ¿Cuál será el factor dominante en las nuevas comunidades de discípulos?

Carlos Scott

Foto Gilbert Lennox

jueves, 6 de noviembre de 2025

La iglesia como comunidad del Reino de Dios está llamada a ser una señal y multiplicar la bendición de Dios por medio de las nuevas comunidades de fe. Nuestro enfoque está en el Reino de Dios.

El vigor en la espiritualidad

¿Las iglesias se pueden debilitar al tener como prioridad el comienzo de nuevas comunidades de discípulos?

La iglesia como comunidad del Reino de Dios está llamada a ser una señal y multiplicar la bendición de Dios por medio de las nuevas comunidades de fe. Nuestro enfoque está en el Reino de Dios.

Algunas veces el liderazgo piensa que no hay suficientes miembros en una congregación para comenzar el inicio de una nueva comunidad. Se piensa que debe haber mucha gente antes de dar otro paso. El resultado final es el estancamiento, la falta de vigor y la debilidad.

Cuando una iglesia local solo piensa en sí misma, su vida comienza a girar en torno al mantenimiento de su estructura y no en torno a la misión. Todas las virtudes y recursos son colocados en un solo lugar al mejor estilo de Babel. Se pierde el sentido de ser una fuerza centrífuga donde es más importante tener una gran cantidad de miembros que la extensión del Reino de Dios. Se cambia el concepto del discipulado y seguimiento a Jesús por la membresía. Se piensa que con esto es suficiente.

Este orden interno puede generar que los ministerios se transformen en espacios de poder y los métodos para tener más miembros sean más importantes que los contenidos. El resultado será una teología enfocada en el rendimiento, el control, el desarrollo eclesiástico, su jerarquía, nombramientos y la concepción equivocada que estar más cerca del templo es estar más cerca de Dios.

Lo importante para el Espíritu Santo no es la estructura eclesiástica sino la misión. El Espíritu una y otra vez llama a su iglesia a reformarse y tener vigor para ser fiel a su misión

La multiplicación de nuevas comunidades de discípulos (donde hay dos o tres el Señor está presente) crea nuevas oportunidades para el uso de los dones. La obesidad no es recomendada en la vida de las iglesias y dar nacimiento a una nueva congregación es una de las alegrías más grandes. La iglesia como organismo vivo está llamada a no caer en la trampa del modelo institucional que la limita y colocar la estructura por arriba de la misión

Carlos Scott

Foto Gilbert Lennox

miércoles, 5 de noviembre de 2025

Somos llamados a servirnos unos a otros por la pasión que tenemos por el evangelio. Nos necesitamos, 1 Co 12.21-22

La espiritualidad en servirnos unos a otros

Somos llamados a servirnos unos a otros por la pasión que tenemos por el evangelio. Nos necesitamos, 1 Co 12.21-22. Somos miembros los unos de los otros. Nadie le puede decir al otro: «no te necesito», 2 Co 10.12, 17-18.

Nuestro problema, muchas veces, está en pensar que no necesitamos de nadie y que no hace falta compartir con otros. Debemos cambiar y arrepentirnos.

Para que exista la cooperación, comunión y solidaridad se necesita haber cumplido con un nivel de confianza que es muy difícil de edificar cuando alguien se muestra autosuficiente. La belleza de la encarnación es que Jesucristo siendo por naturaleza Dios se «rebajó» voluntariamente para estar entre nosotros.

Debemos tener unanimidad con los planes del Padre, Lc 6.27-31. Esta unanimidad con Él nos habla de un mismo sentir y parecer, Fil 2.1-11. Nos habla de perdonarnos, de humillarnos, de entender y comprender nuestras diferentes culturas y ayudarnos mutuamente. No hay nadie superior, ni nadie inferior. Significa también que debemos construir mejor nuestro puente de comunicación.

Como siervos, nuestra presencia, nuestro compromiso, nuestra flexibilidad y cooperación son indispensables. Junto a esto, debemos enriquecer el diálogo entre todo el cuerpo de Cristo: la iglesia global. No hay Norte o Sur, Este u Oeste, lo que hay es «un solo cuerpo».

Cuando servimos en medio de la cooperación, comunión y solidaridad podemos decir como el apóstol dijo de Epafrodito: «mi hermano, colaborador y compañero de lucha» «Es una ofrenda fragante, un sacrificio que Dios acepta con agrado», Fil 2.25 y 4.18.

Se nos invita a tomar una decisión, creer, a no dudar y tomarnos de la mano de Dios. Dejemos que sea Dios quien dirija nuestra danza. Será necesario aprender los pasos, escuchar la música del Espíritu y ser un acontecimiento de gracia al desplegarse su vida en nosotros.

Para Pensar: ¿Qué implica ser una comunidad abierta, de invitación y amor?

Carlos Scott

Foto Gilbert Lennox

martes, 4 de noviembre de 2025

Es el Espíritu Santo que abre puertas y buscar lo que el Espíritu manifiesta es encontrarnos con el propósito de Dios, Ap. 3:8. El Espíritu Santo nos da oportunidades, pero también puede cerrar puertas. “El corazón del hombre traza su rumbo, pero sus pasos los dirige el Señor” Pr 16:9

El discernimiento en la espiritualidad

¿Cómo solemos escuchar la voz del Espíritu Santo?

La iglesia de Antioquía nos muestra un ministerio compartido y no individual, Hch 13:1-3. Formaban un liderazgo espiritual con diferentes trasfondos.

Era un liderazgo internacional e intercultural. Venían de diferentes regiones: Bernabé de Chipre, Manaén venía de los círculos gubernamentales de Jerusalén, Saulo de Tarso, Lucio de Cirene de extracción árabe proveniente del Norte de África y Simeón apodado el Negro de la cuenca del Nilo en África oriental. Encarnaban un compañerismo que servía de modelo a la congregación.

Entre ellos había profetas y maestros. Diferentes énfasis teológicos. La guía del Espíritu se manifiesta por el discernimiento, la sabiduría espiritual y las circunstancias o acontecimientos.

La vida espiritual es el reflejo de aquella vida que está en comunión con Dios manifestando el carácter espiritual o fruto del Espíritu Santo. Esto permite encontrar las oportunidades o puertas que Dios abre o cierra ante nosotros.

Antioquía fue una comunidad abierta que escuchaba al Espíritu de Dios y se organizó a partir de la misión.

«El Espíritu Santo dijo: «Apártenme a Bernabé y a Saulo para el trabajo al que los he llamado» "Bernabé y Saulo, enviados por el Espíritu Santo, bajaron a Seleucia, y allí navegaron a Chipre”, Hch 13:1-4. La vida guiada bajo la influencia del Espíritu Santo busca las puertas abiertas y oportunidades que Dios está presentando ante nosotros, 2 Co 2:12. Es el Espíritu Santo que abre puertas y buscar lo que el Espíritu manifiesta es encontrarnos con el propósito de Dios, Ap. 3:8.

El Espíritu Santo nos da oportunidades, pero también puede cerrar puertas. Le prohibió al equipo apostólico predicar la palabra en la provincia de Asia, Hch 16:6-10. Luego, cuando llegaron cerca de Misia, intentaron pasar a Bitinia, pero el Espíritu de Jesús no se lo permitió. Fue recién cuando bajaron a Troas durante una noche que Pablo tuvo una visión donde se le indicaba que debían comenzar la misión en Europa.

“El corazón del hombre traza su rumbo, pero sus pasos los dirige el Señor” Pr 16:9.

Carlos Scott

Foto Gilbert Lennox

“No agravien al Espíritu Santo de Dios, con el cual fueron sellados para el día de la redención”, Ef. 4:30. No menospreciemos a otros hermanos o sectores de la iglesia. Vivamos el poder del amor y no el amor al poder.

Percibir algo más “Otros se burlaban y decían: «Lo que pasa es que están borrachos”, Hch 2:13   Cuando el Espíritu Santo descendió en el día...