martes, 7 de septiembre de 2021

¿Qué impide?

 ¿Qué impide?

Cuando pensamos en los movimientos de nuevas comunidades de fe o comenzar la plantación de nuevas iglesias debemos hacernos la misma pregunta que le hizo el etíope a Felipe: ¿Qué impide?

Felipe fue una persona llena del Espíritu Santo y sabiduría, elegido para atender las necesidades de la comunidad. Con el martirio de Esteban comienza la persecución y la dispersión de la Iglesia. Estas circunstancias llevaron a Felipe a trasladarse a una ciudad en Samaria que se llenó de alegría con la predicación y demostración del evangelio. En medio de este despertar y crecimiento Dios lo lleva al desierto.

En un lugar desértico el Espíritu Santo le indico anunciar las buenas nuevas acerca de Jesús a un etíope. En medio del camino encontraron un lugar donde había agua y es aquí donde la pregunta del etíope resuena e impacta en nuestros días: “¿Qué impide que yo sea bautizado?”. Felipe lo bautizó y el etíope siguió alegre su camino, Hch 8:26-40

Ante la pregunta: ¿Qué impide?, la respuesta de Felipe no estuvo condicionada por una determinada estructura eclesial o bien por la ausencia de los apóstoles que estaban en Jerusalén. El Espíritu lo guío a una nueva obediencia que todos necesitamos para ser una comunidad que le lleva alegría a la gente. Felipe bautizó al etíope. 

Cuando el Espíritu de Dios comienza a reformar las estructuras eclesiásticas se presentan nuevos desafíos en saber ser iglesia en un determinado contexto. Nos encontramos en un tiempo de introspección y purificación. Se nos llama a seguir formando nuevas comunidades de fe a favor de los no alcanzados y desatar el evangelio 

Para Pensar: ¿Qué impide que podamos liberar y soltar a la gente para formar nuevas comunidades de fe? ¿Cuáles son los obstáculos? ¿Cómo podemos superarlos?

Carlos Scott

Foto de Vinod Baskaran

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