lunes, 8 de mayo de 2023

Compromiso ineludible

 Resurrección y periferia

”No se asusten —les dijo—. Ustedes buscan a Jesús el nazareno, el que fue crucificado. ¡Ha resucitado! No está aquí. Miren el lugar donde lo pusieron. Pero vayan a decirles a los discípulos y a Pedro: “Él va delante de ustedes a Galilea. Allí lo verán, tal como les dijo …, Les dijo: «Vayan por todo el mundo y anuncien las buenas nuevas a toda criatura”, Mc 16:6-15

Galilea era una región de poca importancia llamada tierra de paganos o gentiles, Is. 9:1, Mt. 4:15. Era un lugar de tierra rica pero explotada por latifundistas (Propiedad agraria de gran extensión que pertenece a pocas personas y que se caracteriza por la mala explotación de sus recursos). Por lo general la gente vivía marginada, con vergüenza y desprecio.  Galilea es sinónimo de pobreza mientras que Jerusalén tenía privilegios políticos y religiosos. «Es muy posible que toda Galilea estuviera superpoblada en relación con las posibilidades de la tierra. Abundaban los huérfanos, las viudas, los pobres y los desempleados». Había muchos desheredados, hombres sin patria «Los discípulos son convocados a un peregrinaje…, de la marginalidad al compromiso. Jesús todavía continúa diciéndonos: Sígueme, Lc. 5:27, 9:59, 18:22». Fue en Galilea donde Jesús comenzó su ministerio, Lc. 4:14-15; y eligió a sus primeros discípulos, Lc. 6:12-16. Darío López comenta que la opción de Jesús por Galilea no fue circunstancial sino una elección intencional. ¿Porque la opción no surgió desde Jerusalén? Jesús eligió cumplir su ministerio entre las masas olvidadas por los líderes políticos y religiosos para luego ir a Jerusalén. La periferia representó tarea impostergable y compromiso ineludible. Incluía a todos ya sean Judíos, Samaritanos y Gentiles. Jesús los envía a llevar la buena nueva del Reino de Dios y este mandato es para todas las generaciones. Un mensaje que tiene que ver con la transformación total de la existencia humana. Por lo tanto, Jesucristo nos comisiona desde la periferia a llevar todo el evangelio a todas las naciones. «La misión es una tarea cotidiana de la iglesia en cualquier lugar, en cualquier tiempo y en cada generación»

Carlos Scott

Foto de Gilbert Lennox


domingo, 7 de mayo de 2023

Motivos y razones

 Saber Pasar

"Permítanme recordarles, hermanos, el evangelio que les prediqué antes. Ustedes lo aceptaron entonces, y perseveran en él.  Es por medio de este mensaje como ustedes alcanzan la salvación; es decir, si todavía lo creen firmemente. Si no, todo fue en vano. Lo primero que hice fue transmitirles lo que me enseñaron: que Cristo murió por nuestros pecados, de acuerdo con las Escrituras; que fue sepultado y que al tercer día se levantó de la tumba, según las Escrituras; que se le apareció a Cefas y, más tarde, a los doce. Después se apareció a más de quinientos cristianos a la vez, la mayoría de los cuales vive todavía, aunque algunos han muerto ya. Luego se le apareció a Jacobo, y después a todos los apóstoles. Y, por último, como a uno que había nacido fuera de tiempo, se me apareció a mí.” 1 Cor 15: 1-8
 
La resurrección de Jesucristo nos da suficientes motivos, razones y certezas para confiar y seguir a Jesús. Ante el mal que nos desgarra, tenemos la fortaleza que nos levanta. Ante la adversidad que nos desconcierta, tenemos una fuerza superior. Ante el mal que nos aflige, tenemos la esperanza que nos revive. En medio de cualquier oscuridad, decepción o frustración debemos recordar una vez más que hay un nuevo día y amanecer. La luz triunfa sobre las tinieblas, la vida sobre la muerte, la justicia sobre la injusticia, la verdad sobre la mentira y el amor sobre el odio. Respira la esperanza y lucha contra la muerte. Pasemos de la resignación a la acción; de la indiferencia a la solidaridad; de la queja a la búsqueda de soluciones; de la desconfianza al abrazo sincero; del miedo al coraje de volver apostar todo por amor; de recoger sin vergüenza los trozos de sueños rotos y volver a empezar; de la autosuficiencia al compartir el fracaso y los éxitos; de hacer las paces con nuestro pasado para que no arruine nuestro presente, y sobre todo encontrarnos con Jesucristo que es nuestro Salvador. Demos a conocer esta noticia. ¡He visto al Señor!, Jn 20:18

Carlos Scott

Foto de Gilbert Lennox

sábado, 6 de mayo de 2023

Confiar y seguir

 Certezas, motivos y razones

“No llores, no tengas miedo” ¡Cristo ha resucitado!, Mt 28:5
 
La resurrección de Jesucristo nos da suficientes motivos, razones y certezas para confiar y seguir a Jesús. En medio de cualquier oscuridad, desilusión o frustración debemos volver a recordar que hay un nuevo día y amanecer. La luz triunfa sobre las tinieblas, la vida sobre la muerte, la justicia sobre la injusticia, la verdad sobre la mentira y el amor sobre el odio. Sin entender todo, se nos llama a creer y avanzar. La única manera de conocer a Jesús es caminar con él. En medio del camino las dudas son aclaradas y viene la certeza. María Magdalena se quedó llorando junto al sepulcro, Jn 20:10-11 y busca a Jesús como alguien que está muerto, Lc 24:5. No ve a Jesús resucitado. Estamos tentados a pensar que la resurrección de Jesucristo no puede ayudarnos en nuestras luchas, dudas y temores. Jesús nos invita a cambiar nuestro criterio. Jesús cuestionó a María Magdalena ¿Por qué lloras? Quiere que veamos su presencia en medio de toda circunstancia. Como seguidores de Jesús somos llamados a tener amplitud. Jesús no dejó sola a María Magdalena y la llamó por su nombre. Ninguna situación está fuera del control de Dios. Ella y las otras mujeres le abrazaron los pies y lo adoraron, Mt 28:9, pero su mandamiento fue de animar a los hermanos, salir al mundo y no privatizar la misión. No podemos detener a Jesús sino soltarlo y estar en su seguimiento. “Vivir de acuerdo con la resurrección de Jesucristo es permitir que su voluntad sea la guía para todo aspecto de nuestra vida” Demos a conocer esta noticia ¡He visto al Señor!, Jn 20:18. Salgamos con una misión de amor compartiendo todo el evangelio con toda la humanidad 

Carlos Scott

Foto de Gilbert Lennox

viernes, 5 de mayo de 2023

Valor

Salir de las sombras

“Más tarde, José de Arimatea, quien había sido un discípulo secreto de Jesús (por temor a los líderes judíos), pidió permiso a Pilato para bajar el cuerpo de Jesús. Cuando Pilato concedió el permiso, José fue a buscar el cuerpo y se lo llevó.  Lo acompañó Nicodemo, el hombre que había ido a ver a Jesús de noche. Llevó consigo unos treinta y tres kilos de ungüento perfumado, una mezcla de mirra y áloe. De acuerdo con la costumbre de los entierros judíos, envolvieron el cuerpo de Jesús untado con las especias en largos lienzos de lino. El lugar de la crucifixión estaba cerca de un huerto donde había una tumba nueva que nunca se había usado. Y, como era el día de preparación para la Pascua judía y la tumba estaba cerca, pusieron a Jesús allí”, Jn 19:38-42

José de Arimatea y Nicodemo (Jn 7:32, 50-51) se transformaron en discípulos de Jesús. Ellos aparecieron arriesgándose. Salieron de la oscuridad y tomaron el cuerpo de Jesús para darle sepultura. Esto requería valor y fue parte de un proceso que los transformó en seguidores de Jesús. Juan seguramente narra estos acontecimientos con la esperanza y propósito de provocar una transformación en los cristianos secretos de su tiempo que querían mantener secreta su fe en Jesús y no entrar en problemas con los demás. No podemos domesticar el Reino de Dios a nuestra forma de pensar y ser. Su Reino viene para todos y somos llamados a ser testigos. Jesús pretende dirigir el Reino Universal por lo tanto Jesús nos confronta. Su Reino es una invitación abierta para aceptar sus prioridades y el poder del Espíritu Santo nos debe llevar de todas partes a todos lados.

Carlos Scott

Foto de Gilbert Lennox 

jueves, 4 de mayo de 2023

Audaces y valientes

 Buscando la luz

"Ya era viernes por la tarde, y los judíos se estaban preparando para las celebraciones especiales del día sábado. Un hombre llamado José, del pueblo de Arimatea, no tuvo miedo de pedirle a Pilato el cuerpo de Jesús. José era un miembro muy importante de la Junta Suprema. Además, él oraba para que el reinado de Dios empezara pronto. Pilato se sorprendió mucho al oír que Jesús ya había muerto. Por eso, llamó al oficial romano para ver si era cierto, y para averiguar cuándo había sucedido. Cuando el oficial regresó con el informe, Pilato dio permiso para que le entregaran a José el cuerpo de Jesús. José compró entonces una sábana de tela muy fina y cara. Bajó a Jesús de la cruz, lo envolvió en la sábana y lo puso en una tumba. Hacía poco tiempo que José la había mandado construir en una gran roca. Luego tapó la entrada de la tumba con una piedra muy grande”, Mc 15:42-47

Cuando hay mucha familiaridad con la oscuridad debemos seguir confiando que puede aparecer la luz que necesitamos. Dios nos llama a no renunciar a lo que hemos creído y sostenido. “José era seguidor de Jesús, pero no se lo había dicho a nadie porque tenía miedo de los líderes judíos”, Jn19:38. La esperanza puede resurgir cuando seguimos siendo audaces y valientes. “Jose fue un hombre bueno y honesto, y deseaba que Dios comenzara ya a reinar en el mundo. José era miembro de la Junta Suprema, pero cuando la Junta decidió que Jesús debía morir, él no estuvo de acuerdo”, Lc 23:50-51. Dios nos llama a salir de la oscuridad y caminar hacia la luz. “Jose oraba para que el reinado de Dios empezara pronto”. Es una luz que no podemos ocultar. »Ustedes son como una luz que ilumina a todos. Son como una ciudad construida en la parte más alta de un cerro y que todos pueden ver. Nadie enciende una lámpara para meterla debajo de un cajón. Todo lo contrario: la pone en un lugar alto para que alumbre a todos los que están en la casa”, Mt 5:14-15. "Desde que Juan el Bautista comenzó a predicar hasta ahora, el reino de Dios avanza a pesar de sus enemigos. Sólo la gente valiente y decidida logra formar parte de él”, Mt 11:12

Carlos Scott

Foto de Gilbert Lennox

miércoles, 3 de mayo de 2023

Se puso en nuestro lugar

 Conocedor del dolor más profundo

“Desde el mediodía hasta las tres de la tarde, el cielo se puso oscuro. A esa hora, Jesús gritó con mucha fuerza: «Eloí, Eloí, ¿lemá sabactani?» Eso quiere decir: «¡Dios mío, Dios mío! ¿Por qué me has abandonado?», Mc 15:33-34. “Entonces Jesús volvió a gritar con fuerza, y entregó su espíritu”, Mt 27:50

“Fue despreciado y rechazado: hombre de dolores, conocedor del dolor más profundo" Nosotros le dimos la espalda y desviamos la mirada; fue despreciado, y no nos importó. Sin embargo, fueron nuestras debilidades las que él cargó; fueron nuestros dolores los que lo agobiaron ...  él fue traspasado por nuestras rebeliones y aplastado por nuestros pecados. Fue golpeado para que nosotros estuviéramos en paz; fue azotado para que pudiéramos ser sanados. Todos nosotros nos hemos extraviado como ovejas; hemos dejado los caminos de Dios para seguir los nuestros. Sin embargo, el Señor puso sobre él los pecados de todos nosotros. Fue oprimido y tratado con crueldad; sin embargo, no dijo ni una sola palabra. Como cordero fue llevado al matadero. Y como oveja en silencio ante sus trasquiladores, no abrió su boca. Al ser condenado injustamente, se lo llevaron ... Él no había hecho nada malo, y jamás había engañado a nadie. Pero fue enterrado como un criminal; ... Sin embargo, cuando su vida sea entregada en ofrenda por el pecado, tendrá muchos descendientes ... Y a causa de lo que sufrió, mi siervo justo hará posible que muchos sean contados entre los justos, porque él cargará con todos los pecados de ellos. Yo le rendiré los honores de un soldado victorioso, porque se expuso a la muerte ...”, Is 53:10-12. "Cristo nunca pecó. Pero Dios lo trató como si hubiera pecado, para declararnos inocentes por medio de Cristo", 2 Co 5:20

Carlos Scott

Foto de Gilbert Lennox

martes, 2 de mayo de 2023

Traspasa todo poder

 Mirarán al que traspasaron

"Cuando llegaron a Jesús, se dieron cuenta de que ya había muerto. Por eso no le quebraron las piernas. Sin embargo, uno de los soldados atravesó con una lanza el costado de Jesús, y enseguida salió sangre y agua. Todo esto sucedió para que se cumpliera lo que dice la Biblia: «No le quebrarán ningún hueso». En otra parte, la Biblia también dice: «Mirarán al que atravesaron con una lanza».Jn 19:31-37. 

Jesús fue traspasado en la cruz y el que fue atravesado con una lanza es el que traspasa todo poder. Es el poder del amor su fuerza irresistible y nos llama a tener otra mirada. Significa seguir la lógica del amor y dejar que mi orgullo, el deseo de supremacía, el instinto de imponer, la pretensión de conquistar posiciones favorables, la tentación de hacerse valer sea crucificado y clavado en la cruz. Es dejar que me atraviese su vida y su espíritu quitando todo otro poder. “¿Acaso piensan que las Escrituras no significan nada? Ellas dicen que Dios desea fervientemente que el espíritu que puso dentro de nosotros le sea fiel. Y él da gracia con generosidad. Como dicen las Escrituras: «Dios se opone a los orgullosos, pero da gracia a los humildes» Así que humíllense delante de Dios. Resistan al diablo, y él huirá de ustedes. Acérquense a Dios, y Dios se acercará a ustedes. Lávense las manos, pecadores; purifiquen su corazón, porque su lealtad está dividida entre Dios y el mundo. Derramen lágrimas por lo que han hecho. Que haya lamento y profundo dolor. Que haya llanto en lugar de risa y tristeza en lugar de alegría.  Humíllense delante del Señor, y él los levantará con honor”, Stg 4:5-10. “Él fue traspasado por nuestras rebeliones, y molido por nuestras iniquidades; sobre él recayó el castigo, precio de nuestra paz, y gracias a sus heridas fuimos sanados”, Is 53:5. "Los que buscan su ayuda estarán radiantes de alegría; ninguna sombra de vergüenza les oscurecerá el rostro”, Sal 34:5. “¡Miren! Él viene en las nubes del cielo. Y todos lo verán, incluso aquellos que lo traspasaron. Y todas las naciones del mundo se lamentarán por él. ¡Sí! ¡Amén!”, Ap 1:7

Carlos Scott

Foto de Gilbert Lennox

lunes, 1 de mayo de 2023

Ver con Claridad

 Una declaración decisiva

”Jesús lanzó un fuerte grito y murió …  El oficial romano que estaba frente a Jesús lo vio morir, y dijo: —En verdad este hombre era el Hijo de Dios.”, Mc 15:37-39

Marcos nos habla de un oficial romano que reconoce en Jesús al Hijo de Dios.  Esta declaración constituye el punto de llegada del Evangelio. Es la respuesta tan esperada a una pregunta fundamental: ¿Quién es Jesús? Esta contestación viene de parte de un gentil o pagano y se constituye en una verdadera declaración de fe. Nos hace ver que el Espíritu prometido ya estaba actuando en medio de las personas. Cuando Jesús fue bautizado una voz que venía del cielo le dijo: «Tú eres mi Hijo, a quien quiero mucho. Estoy muy contento contigo.», Mc 1:11 y ahora, en el Calvario, después de su muerte hay un reconocimiento: "En verdad este hombre era el Hijo de Dios". Es interesante observar que esta declaración no viene de parte de un discípulo, un amigo o un familiar, sino de parte de un gentil. Este oficial llegó a descubrir la identidad de Jesús no precisamente en el momento del triunfo, sino en la derrota y el fracaso. Nos encontramos con el cuerpo de Jesús azotado, una corona de espinas en la cabeza, desnudo, burlado, expuesto a todos los golpes, clavado y asesinado en una cruz. Es conmovedor ver que Jesús es reconocido no en el momento feliz de los milagros, sino cuando se negó a hacer el milagro de bajar de la cruz y murió. En la oscuridad del final es reconocido por este oficial, un gentil que puede ver con claridad. En medio de la densa tiniebla que cubrió la tierra, esta persona pudo distinguir un rostro divino. Lo reconoce cuando está desfigurado y no transfigurado. “Creyente no es el privilegiado envuelto en la luz; es el que, incluso en la oscuridad, logra ver claro” “Mientras esperan al Señor, muéstrense alegres; cuando sufran por el Señor, muéstrense pacientes; cuando oren al Señor, muéstrense constantes.”, Ro 12:12

Carlos Scott

Foto de Gilbert Lennox

domingo, 30 de abril de 2023

Personas inesperadas

 Modificando el itinerario

”Los soldados salieron con Jesús, y en el camino encontraron a un hombre llamado Simón, que era del pueblo de Cirene. Simón era padre de Alejandro y de Rufo; regresaba del campo y los soldados lo obligaron a cargar la cruz de Jesús”, Mc 15:21

Cirene es una ciudad del norte de África en Libia. Allí habitaban numerosos judíos y representaban una cuarta parte de la población. Marcos nos presenta a Simón y a sus hijos que probablemente serían personas conocidas en la primera comunidad cristiana. Simón es obligado a dar un servicio y en este caso llevar la cruz de Jesús. Simón regresaba del campo que en definitiva representaba la periferia de la ciudad y es el protagonista de un hecho histórico. Es el primer discípulo que sigue a Jesús llevando la cruz. Tiempo atrás Jesús les había enseñado a los discípulos que debían estar preparados para llevar la cruz, pero en esa hora no podemos encontrarlos. Al no haber voluntarios para llevar la cruz, los soldados proceden a llamar a otra persona, le guste o no le guste. En este caso el llamado al seguimiento no se ha realizado por el Señor, sino por los que van a ejecutar la pena de muerte. Hay situaciones en que el seguimiento a Jesús se transforma en un llamado que viene de un mundo que pide urgentemente nuestra intervención, nos guste o no. El gesto de Simón de Cirene como la declaración de fe del oficial romano al ver morir a Jesús (Mc 15:39), indican que nuestro Dios levanta otras personas inesperadas, llegadas de lejos, que realizan y dicen lo que deberían haber hecho y dicho los “cercanos”, “los íntimos”, pero que no se dejan encontrar en la hora decisiva. Junto a Jesús no hay puestos reservados, son más bien lugares dejados libres y esto nos desafía a modificar nuestros itinerarios. “No sean nunca perezosos, más bien trabajen con esmero y sirvan al Señor con entusiasmo. Alégrense por la esperanza segura que tenemos. Tengan paciencia en las dificultades y sigan orando. Estén listos para ayudar a los hijos de Dios cuando pasen necesidad. Estén siempre dispuestos a brindar hospitalidad”, Ro 12:11-13

Carlos Scott

Foto de Gilbert Lennox

sábado, 29 de abril de 2023

Dolor profundo

 Un escrito realizado con lágrimas

“… le colocaron en la cabeza una corona hecha con ramas de espinos. Entonces comenzaron a burlarse de él, … Lo golpeaban en la cabeza con una vara y lo escupían, y arrodillándose delante de él le hacían reverencias. Cuando se cansaron de burlarse de él, le quitaron el manto rojo y le pusieron su propia ropa. Después se lo llevaron para clavarlo en la cruz.”, Mc 15:16-20

Este relato nos genera un fuerte pesar, lágrimas y dolor profundo. Esto es lo que nos describe Marcos cuando escribió sobre la crucifixión de Jesús. Lucas expresa: “Entonces Pilato sentenció a Jesús a muerte como la gente reclamaba… Y les entregó a Jesús para que hicieran con él como quisieran.”, Lc 23:24-25. El Señor y Rey del universo es maltratado por la humanidad. El justo sufriendo por los injustos, “tenía el rostro tan desfigurado que apenas parecía un ser humano, y por su aspecto, no se veía como un hombre.”, Is 52:14. “¿Quién ha creído nuestro mensaje? ¿A quién ha revelado el Señor su brazo poderoso? Mi siervo creció en la presencia del Señor como un tierno brote verde, como raíz en tierra seca ... Fue despreciado y rechazado: hombre de dolores, conocedor del dolor más profundo. Nosotros le dimos la espalda y desviamos la mirada; fue despreciado, y no nos importó. Sin embargo, fueron nuestras debilidades las que él cargó; fueron nuestros dolores los que lo agobiaron ...  él fue traspasado por nuestras rebeliones y aplastado por nuestros pecados. Fue golpeado para que nosotros estuviéramos en paz; fue azotado para que pudiéramos ser sanados. Todos nosotros nos hemos extraviado como ovejas; hemos dejado los caminos de Dios para seguir los nuestros…, Fue oprimido y tratado con crueldad; … no dijo ni una sola palabra…, Sin embargo, cuando su vida sea entregada en ofrenda por el pecado, tendrá muchos descendientes…, Yo le rendiré los honores de un soldado victorioso, porque se expuso a la muerte. Fue contado entre los rebeldes. Cargó con los pecados de muchos e intercedió por los transgresores”, Is 53:1-9.

Carlos Scott

Foto de Gilbert Lennox

viernes, 28 de abril de 2023

Aquí y ahora

Para este mundo

“Mi reino no es de este mundo —contestó Jesús—. Si lo fuera, mis propios guardias pelearían para impedir que los judíos me arrestaran. Pero mi reino no es de este mundo”, Jn 18:36
 
Jesús nos dice que su reino no se origina en este mundo, en su sistema, en sus opciones. Su reino se origina en Dios, pero es para este mundo. “Si el ‘reino’ tiene que ver solamente con el ‘más allá’, los que predican ese ‘reino’ no tendrán mayores conflictos con el “más acá”. Este tipo de evangelio les gusta a los poderes de este mundo, pero también, les puede gustar a los "cristianos" porque no les trae problemas. El Reino de Dios es un reino Universal, multicultural y multiétnico. Jesús es el reino de Dios encarnado derrotando a la maldad y crueldad con su propia vida. Jesús coloca su enfoque en el Reino de Dios y nos ayuda a pensar en esta dimensión. El reino de Dios no es una ética, ni una ideología social sino la autoridad y poder de Dios en acción por medio de palabra y obra que se centraliza en una persona; la persona de Jesús el Mesías. “Cuando alguien pertenece al reino de Dios, lo demuestra por lo que hace y no sólo por lo que dice”, 1 Co 4:20 

Carlos Scott

Foto de Gilbert Lennox

Manos a las piedras

  Recurrente "En nuestra ley, Moisés manda que a esta clase de mujeres las matemos a pedradas.", Jn 8:5 Lamentablemente los que su...