lunes, 13 de marzo de 2023

La posibilidad de ver

 Revelación progresiva

“Jesús y sus discípulos pasaron por la ciudad de Jericó, y al salir de allí mucha gente los siguió. Junto al camino estaba sentado un ciego que pedía limosna. Se llamaba Bartimeo hijo de Timeo”, Mc 10:46
La historia sobre el ciego Bartimeo tiene mucho que enseñarnos sobre la comunión, la cooperación y la solidaridad. Porqué la comunión (koinonia) y solidaridad es valorizar al prójimo. Es saber preguntar: ¿Qué quieres que haga por ti? Es muy común observar que los comentarios de Marcos sobre los discípulos están caracterizados en que no entienden. Tienen las mentes embotadas. En otras palabras, no ven todo como debe ser, les falta claridad y visión. El tema central es la posibilidad de ver. Nosotros muchas veces nos encontramos en el mismo proceso que los discípulos. No vemos con claridad y no entendemos. Necesitamos alcanzar una visión más clara sobre la misión y la comunión. Quizás nos encontramos en medio de un proceso como el ciego de Betsaida (Mr. 8:22-26). Pero en este proceso hay esperanza y posibilidades futuras: el ciego de Betsaida como el ciego Bartimeo llegaron a ver. También vieron los discípulos y también podemos ver nosotros. Existe una revelación, discipulado y discernimiento progresivo. Nosotros podemos alcanzar una visión más clara de la misión. Pero hay un precio para pagar: el seguimiento a Jesús y el proceso de recibir la vista van de la mano. Somos llamados a una conversión continua y esto nos permite abrir las mentes y corazones.  ”¡Pero benditos sean aquellos que sólo confían en mí! Son como árboles plantados a la orilla de un río: extienden sus raíces hacia la corriente, el calor no les causa ningún daño, sus hojas siempre están verdes y todo el año dan fruto”, Je 17:7-8
Carlos Scott
Foto de Gilbert Lennox

domingo, 12 de marzo de 2023

Una imagen invertida del poder

Primeros en amar

“Si alguno quiere ser el primero, deberá ser el esclavo de todos. Yo, el Hijo del hombre, soy así. No vine a este mundo para que me sirvan, sino para servir a los demás. Vine para liberar a la gente que es esclava del pecado, y para lograrlo pagaré con mi vida”, Mc 10:35-45         
Jesucristo vivió el grado más alto de grandeza a través del servicio para luego darlo a la Iglesia. Por eso desde ese momento el fundamento para una institución y sociedad sana sólo puede ser una imagen invertida del poder basada en el amor, la verdad, la paz, la justicia y el servicio. La grandeza, importancia y poder es para servir y no para servirme. Lo cierto es que Jesucristo quiere cambiar nuestra mentalidad y pragmatismo. Jesucristo quiere arrancar completamente de nuestras vidas el afán de dominio de una persona sobre otra. Es una actitud interior. La eclesiología de la iglesia debe ser una imagen invertida del poder. La comunidad del reino de Dios está basada en que cada uno es el servidor de todos los demás. Para eso, hoy más que nunca necesitamos ser rescatados por Dios y asumir nuestra vulnerabilidad. Oramos en este tiempo por la Iglesia y por cada uno de los Países que representamos. Que pueda haber actitudes humildes delante de Dios y de los hombres, a favor de la justicia, la paz y la verdad. Oramos por la iglesia para que encarne la misión a semejanza de Jesucristo. El poder del amor y no el amor al poder. Que la Iglesia de Jesucristo sea una puerta abierta de bendición para todas las naciones.
Carlos Scott
Foto de Gilbert Lennox

sábado, 11 de marzo de 2023

Interpretar el Reino

 La ventaja que otros necesitan

 ”Entonces Jesús los llamó a todos y les dijo: —Ustedes saben que los que se sienten jefes y grandes señores se portan como los amos del mundo e imponen su autoridad sobre todos. Pero entre ustedes no debe ser así. Al contrario, si alguien quiere ser importante, tendrá que servir a los demás”, Mc 10:35-45         
Las diferentes situaciones que se dan en nuestro contexto iberoamericano nos hacen recordar lo que le pasó al grupo de discípulos de Jesús. Entre los discípulos y Jesús mismo había diferentes maneras de interpretar el reino. En algunos de nuestros países parece que también hay diferentes maneras de interpretar lo que significa el reino o los valores que debe tener un determinado sistema. Se contrapone lo que los discípulos quieren y lo que Jesús vino hacer. La discusión que los discípulos tuvieron en Mr. 9:34 sobre quién es el más importante, quedó atrás. Ahora el tema que les ocupa es quien ocupará el primer lugar, quién tendrá más privilegios y ventajas. Jesús responde: “Entre ustedes no debe ser así”. El requisito para ser grande es ser servidor. Lo trascendente es renunciar a un afán de dominio y tener un sello completamente distinto: Ser servidor de todos “El criterio de autoridad, por tanto, es la ventaja que reciben los demás” Si nuestra perspectiva es autoritaria y verticalista, nuestro estilo de vida será impositivo por lo tanto no cuestionaremos los abusos de autoridad o poder. Los diferentes sectores en pugna que encontramos en nuestras regiones muestran sus serias falencias. El peligro de los abusos de autoridad sigue latente. La respuesta que tenemos como Iglesia ante la sociedad es encarnar el mensaje, predicar a tiempo y fuera de tiempo: ser, hacer y decir. Jesús con su ejemplo indica que el poder es para servir, amar al prójimo y la grandeza implica la capacidad de ser humilde.
Carlos Scott
Foto de Gilbert Lennox

viernes, 10 de marzo de 2023

No podemos seguir el mismo camino

Incompatibilidad de caminos

 ”Entonces Jesús los llamó a todos y les dijo: …”, Mc 10:42
Hay personas que no pueden ir por el mismo camino. Nos encontramos con la incompatibilidad de caracteres entre el seguimiento de Jesús y la búsqueda de honores, privilegios y fama. “Jesús les preguntó: —¿Qué es lo que quieren? Ellos le contestaron: —Por favor, cuando estés en tu reino poderoso, déjanos sentarnos a tu lado, uno a tu derecha y el otro a tu izquierda. Jesús respondió: —Ustedes no saben lo que piden. ¿Están dispuestos a sufrir todo lo malo que va a pasarme? Ellos dijeron: —Sí, lo estamos. Jesús les dijo: —Les aseguro que ustedes sufrirán mucho, igual que yo”, Mc 10:36-39. Los seguidores de Jesús son compatibles con el Señor cuando están dispuestos a ir por dónde él va. Son esos momentos en medio del camino donde necesitamos encontrar una palabra y seguridad: “Jesús es el Hijo de Dios, y es nuestro gran Jefe de sacerdotes, que ha subido al cielo. Por eso debemos seguir confiando en él. El diablo le puso a Jesús las mismas trampas que nos pone a nosotros para hacernos pecar, sólo que Jesús nunca pecó. Por eso, él puede entender que nos resulta difícil obedecer a Dios. Así que, cuando tengamos alguna necesidad, acerquémonos con confianza al trono de Dios. Él nos ayudará, porque es bueno y nos ama.” Jesús manifiesta un servicio de misericordia y compasión. Su gloria no es satisfacer la ambición o la sed de dominio, sino la gloria de amar a la gente, compartir su debilidad, acompañarlos con su ternura a lo largo de un camino difícil. Jesucristo nos conoce desde dentro en nuestra condición humana. Su profunda capacidad de compasión viene de la familiaridad en el dolor. Jesús conoce el lenguaje de la angustia, del hambre, del desánimo, de la duda, de la soledad. Entonces no se trata de buscar un lugar a la derecha o la izquierda de Dios. Se trata ser agradecidos porque Jesús puede sentarse a mi lado en misericordia y oportuno socorro.
Carlos Scott
Foto de Gilbert Lennox

martes, 7 de marzo de 2023

Honor y Poder

 Caminos y senderos diferentes

“Sus discípulos Santiago y Juan, que eran hijos de Zebedeo, se acercaron a Jesús y le dijeron: —Maestro, queremos que nos hagas un favor. Jesús les preguntó: —¿Qué es lo que quieren? Ellos le contestaron: —Por favor, cuando estés en tu reino poderoso, déjanos sentarnos a tu lado, uno a tu derecha y el otro a tu izquierda, Mc 10:35-37
 Mientras que el camino de Jesús es dar su vida por toda la humanidad, algunos de sus discípulos pensaban en su propia gloria. Los compañeros de Santiago y Juan se indignaron. “Cuando los otros diez discípulos supieron lo que Santiago y Juan habían pedido, se enojaron con ellos”, Mc 10:41. Quizás pensaron “alguien se nos adelantó y nosotros perdimos la oportunidad”. Hay un gran contraste entre ellos y Jesús. Se acercaron pidiendo honor y poder, “el amor al poder y no el poder del amor”. El escritor de Hebreos nos habla de otra manera en la que podemos acercarnos a Jesús “Así que acerquémonos con toda confianza al trono de la gracia de nuestro Dios. Allí recibiremos su misericordia y encontraremos la gracia que nos ayudará cuando más la necesitemos.”, Heb 4:16. Jesús nos muestra otro camino y sendero. “Dios dijo: «¡Miren a mi elegido, al que he llamado a mi servicio! Él cuenta con mi apoyo; yo mismo lo elegí, y él me llena de alegría. »He puesto en él mi espíritu, y hará justicia entre las naciones. Mi fiel servidor no gritará, no levantará la voz, ni se le oirá en las calles. No les causará más daño a los que estén heridos, ni acabará de matar a los que estén agonizando. Al contrario, fortalecerá a los débiles y hará que reine la justicia. No tendrá un momento de descanso hasta que haya establecido la justicia en esta tierra. ¡Los países de las islas del mar esperan recibir sus enseñanzas!», Is 42:1-4. “El fiel servidor dijo: «Dios me enseñó a consolar a los que están afligidos y cansados. Me despierta todas las mañanas, para que reciba sus enseñanzas como todo buen discípulo. Dios me enseñó a obedecer, y no he sido rebelde ni desobediente", Is 50:4-9
Carlos Scott
Foto de Gilbert Lennox

Celebrando la vida

Festejo de cumpleaños: Jonathan y Marta. Despedida de Daniel, Marta e Iker Scott al País Vasco. Celebramos la Vida



Todas las reaccione

miércoles, 1 de marzo de 2023

Daniel, Marta e Iker - País Vasco -

Daniel, Marta e Iker Scott Rizzo

¡Hola amigos/as! Este domingo 5 de marzo volvemos al País Vasco para seguir sirviendo a Dios en este amado pueblo, y estamos buscando 100 personas que se quieran comprometer de verdad cada semana para orar e interceder por nosotros. La oración es la llave más importante en la extensión del Reino de Dios y en la protección de nuestras vidas y necesitamos mucho tus oraciones. Volvemos a servir a Dios en una etnia donde hay un contexto espiritual de mucha oscuridad y oposición.

Cada vez que ores puedes hacerlo por los siguientes motivos:
- Nuestra salud física, emocional y espiritual como familia.
- Protección espiritual y por la salud/desarrollo integral de Iker.
- Sanidad completa para la vida de Iker.
- Nuestro sostén económico.
- Nuevas puertas abiertas para compartir el evangelio entre los vascos.
- Por un movimiento de plantación de iglesias autóctonas en euskera.
- Un avivamiento del Espíritu Santo en el Pueblo Vasco.
Si quieres cada día puedas orar en algún momento del día por un motivo en particular, o también semanalmente. Y si te comprometes a orar por nosotros por favor envíanos un mensaje para que sepamos que contamos contigo. ¡Muchas gracias de todo corazón!
Daniel, Martu e Iker
“Les ruego, hermanos, por nuestro Señor Jesucristo y por el amor del Espíritu, que se unan conmigo en esta lucha y que oren a Dios por mí.” (Romanos 15:30)
daniscott2003@yahoo.com.ar


martes, 28 de febrero de 2023

Un pueblo de niños

Dejarnos hacer

“Hubo quienes llevaron a sus niños para que Jesús los tocara y los bendijera. Pero los discípulos las regañaron. Al ver Jesús lo que estaban haciendo sus discípulos, se enojó con ellos y les dijo: «Dejen que los niños se acerquen a mí. No se lo impidan, porque el reino de Dios es de los que son como ellos. Les aseguro que quien no confía en Dios como lo hace un niño, no puede ser parte del reino de Dios» Jesús tomó en sus brazos a los niños y, poniendo sus manos sobre ellos, los bendijo”, Mc 10:13-16
Jesús ama a los niños y tiene motivo para esto. Le encanta que su pueblo sea un pueblo de “niños” y le gusta rodearse de ellos. Los niños no han aprendido a traicionar y se puede contar con ellos. Jesús nos desafía a ser como ellos y confiar. Es dejarnos hacer, porque el niño se deja hacer. Cuando nos volvemos grandes muchas veces nos transformamos en personas duras y tampoco estamos dispuestos a asumir riesgos y nuevas aventuras. Tratamos de refugiarnos en la seguridad y la prudencia. Para el niño todo es nuevo, es alegría, entusiasmo, creatividad, inquietud, descubrimiento y sorpresa. El mundo de los adultos se ha vuelto bastante oscuro, monótono, está perdiendo la vivacidad, ya no ríe y aprende tanto. Trata de tener planes detallados, pierde la espontaneidad, la novedad y cae en la rutina. Su refugio podría ser una coraza impenetrable cuyo nombre la llaman experiencia o tradición. Dios quiere llegar a nosotros y nuestro desafío es no poner obstáculos. Tenemos que “dejarle hacer”. Es derribar, demoler, arrancar, destruir para recién entonces volver a construir y plantar una nueva forma de ser, Jer 1:9-10. Es quitar las estructuras mentales y volvernos a encontrar con lo sencillo, lo simple y lo “humano”. Los apóstoles discutían de protocolos y se preocupaban de los primeros puestos. Cristo, colocando a un niño en medio de la escena, declara como entrar en el Reino de Dios “y poniendo sus manos sobre ellos, los bendijo”. Quizás debamos volver al inicio y nacer de nuevo, nacer de lo alto. “Ámense siempre los unos a los otros, como hermanos en Cristo”, Heb 13:1
Carlos Scott
Foto de Gilbert Lennox

lunes, 27 de febrero de 2023

No es bueno estar solo

El ideal de Dios

“Unos fariseos se acercaron a él para ponerle una trampa, y le preguntaron: —¿Puede un hombre divorciarse de su esposa?”, Mc 10:1-2
Dios está preocupado por la soledad del ser humano. No es bueno que el ser humano permanezca solo y así lo manifestó Dios en su creación. No puede existir verdadera felicidad, cuando se está solo en la felicidad. El ser humano en separación no puede gustar la propia felicidad. Dios creó al ser humano a su imagen y la imagen de Dios es comunitaria, Dios Padre, Dios Hijo, Dios Espíritu Santo. El ser humano ha sido creado para vivir en armonía con Dios, con su prójimo y la creación. Vivir en comunidad es un desafío. Hablamos de la unidad sin la uniformidad, de la distinción sin caer en el individualismo, de la diferencia sin caer en la división y separación. Encontramos el propósito en la felicidad cuando estamos en relación unos con otros. Nuestra humanidad se realiza plenamente y se manifiesta completamente solo en la relación con otro ser. Podemos “tener todo”, sin embargo, puede faltar algo, nos falta alguien. La alegría de vivir en armonía con Dios implica el encuentro de amor con mi prójimo. El “no es bueno estar solo” afecta la vida social y afectiva. Dios mismo cae en la cuenta de esta necesidad. El proyecto divino respecto al matrimonio es un proyecto de amor, vida, armonía, luz, unidad. El encuentro mutuo del hombre y la mujer es el cara a cara de dos sujetos, de igual dignidad y se realizan en la entrega recíproca para el gozo del otro. La dureza del corazón nos ha separado unos de otros y cuando no le damos lugar al plan de Dios afloran los egoísmos. Una pareja perfecta no depende de un hombre o una mujer perfecta, todo comienza en una correcta relación con Dios. Jesucristo no acude a la ley para salvar a una pareja o darle su curación, sino que propone como una sanidad completa la referencia a un proyecto de amor. No todo pasa por un plano legal, sino en una perspectiva espiritual e integral. La conciencia, cuando se la solicita para que funcione, tiene el inconveniente de molestar. “No hagan que se ponga triste el Espíritu Santo de Dios,... Por eso deben tratar de ser como él es"
Carlos Scott
Foto de Gilbert Lennox

domingo, 26 de febrero de 2023

Un punto de partida

 Comunidad, comunión y solidaridad

“Jesús les respondió: —Les aseguro que quien haya dejado algo por seguirme y por anunciar las buenas noticias, recibirá su premio. Si dejó a sus hermanos o hermanas, a su padre o a su madre, a sus hijos, su casa o algún terreno, recibirá en esta vida cien veces más casas, terrenos y familiares, aunque también será maltratado por sus enemigos. Y cuando muera, vivirá con Dios para siempre; pero muchos que ahora son importantes, serán los menos importantes; y muchos que ahora no son importantes, serán los más importantes", Mc 10:29-31
Dios es un Dios que vive y se alegra en la comunidad. La imagen de Dios es comunitaria, Dios Padre, Dios Hijo y Dios el Espíritu Santo. Hablamos de la relación y la comunión entre las tres personas de la trinidad. Expresar la imagen de Dios es saber vivir en medio de la comunidad y no separados de la misma. Es el lugar de encuentro donde nos animamos y cuidamos los unos a los otros. Nuestro Dios nos anima a salir del egoísmo y dejar de pensar en nosotros mismos. Padre, Hijo y Espíritu Santo todos comparten una sola esencia divina. La divinidad se marca por la unidad y la diversidad sin conflicto. Nos habla de un amor íntimo y perdurable. A través del amor divino, estamos íntimamente relacionados unos con otros. La naturaleza de Dios es la comunión y nos invita a estar en comunión con él y unos con otros. La comunidad no constituye un rinconcito tranquilo y apartado del mundo, sino un punto de partida para ir al mundo. Cuando dejamos algo por seguir al Señor y anunciar las buenas noticias, "recibimos en esta vida cien veces más casas, terrenos y familiares, aunque también seremos maltratados por los enemigos. Y cuando muramos, viviremos con Dios para siempre”. “Ayuda en todo al abogado Zenas, y también a Apolo (en su viaje de servicio). Dales todo lo que necesiten para seguir su viaje (a las naciones), y cuida de que no les falte nada. Los nuestros deben aprender a hacer lo que es bueno, y ayudar a otros. Así vivirán como personas útiles.”, Tito 3:13-14
Carlos Scott
Foto de Gilbert Lennox

sábado, 25 de febrero de 2023

Riesgo y Gracia

 Inquietar más que tranquilizar

“Jesús dijo a sus discípulos: —¡Es muy difícil que una persona rica acepte a Dios como su rey!”, Mc 10:23
Mientras Jesús iba de camino llegó una persona que tenía la inquietud sobre la “vida entera”. Jesús se detuvo y esta fue una oportunidad para enseñar a los discípulos. “—Amigos, ¡es muy difícil entrar en el reino de Dios!  Es más fácil que un camello pase por el ojo de una aguja, que una persona rica entre en el reino de Dios. Los discípulos se sorprendieron mucho al oír lo que Jesús dijo y comentaban entre ellos: —Entonces, ¿quién podrá salvarse?”, Mc 10:24-26. Hay una preocupación pastoral de los discípulos. “Jesús los miró y les dijo: —Para los seres humanos eso es imposible, pero todo es posible para Dios, Mc:10:27. Es imposible salvarnos nosotros mismos, pero si es posible ser salvados. Esta escena y relato es una página destinada a inquietar más que tranquilizar. El énfasis está en “seguir”. El que está con Jesús, encuentra en él todo lo que ha dejado. En el seguimiento se gana una plenitud de vida. Lo que ofrece Jesús lo incluye todo, incluso el maltrato por los enemigos. El estar con Jesús es siempre una riqueza amenazada. Es tiempo de prueba, pero encontramos tesoros. “Jesús les respondió: —Les aseguro que quien haya dejado algo por seguirme y por anunciar las buenas noticias, recibirá su premio. Si dejó a sus hermanos o hermanas, a su padre o a su madre, a sus hijos, su casa o algún terreno, recibirá en esta vida cien veces más casas, terrenos y familiares, aunque también será maltratado por sus enemigos. Y cuando muera, vivirá con Dios para siempre, pero muchos que ahora son importantes, serán los menos importantes; y muchos que ahora no son importantes, serán los más importantes.”, Mc 10:29-31. Ellos son invitados a una experiencia en la cual serán recompensados por su desprendimiento con una nueva comunidad de bienes y relaciones interpersonales.  En el seguimiento de Jesús hay riesgo, pero hay Gracia. Caminar con Dios es confiar. “Por eso, de sus riquezas maravillosas mi Dios les dará, por medio de Jesucristo, todo lo que les haga falta” Fil 4:19
Carlos Scott
Foto de Gilbert Lennox

Dejar los prejuicios

  Desliz "¿Tú qué opinas?", Jn 8:5 Dios nos llama a purificar nuestra vida y la forma de ver la vida. Se trata de salir de nuestro...