lunes, 9 de septiembre de 2024

Sentido común

 Crisis

“Allí estaba Nicodemo, el fariseo que una noche fue a ver a Jesús, y les dijo:  —Según nuestras leyes, no podemos condenar a nadie sin antes escucharlo", Jn 7 50-51

Las autoridades preguntaron ¿Acaso ha creído en él alguno de nuestros jefes, o alguno de los fariseos? Inesperadamente existe uno y da la cara. Nicodemo dijo: " —Según nuestras leyes, no podemos condenar a nadie sin antes escucharlo". El frente de la ortodoxia oficial se ha roto y la palabra de Jesús provoca una crisis. Nicodemo apela al sentido común y se remite a la praxis legal más elemental, pero ellos no necesitan escuchar ni examinar las pruebas ni constatar los hechos. Ellos le respondieron a Nicodemo: "—¿También tú crees que de Galilea puede salir algo bueno? Estudia la Biblia y verás que de allá no ha venido ningún profeta". Ellos saben y ya han decidido. Lo que sucede es que cualquier persona que se levante a cuestionar, se convierte necesariamente en un ignorante. Nicodemo, aunque pertenece a su clase, es descalificado rotundamente. Lo nuevo es enemigo de la ortodoxia oficial y por lo tanto debe ser rechazado. A Nicodemo se le recomienda una terapia de recuperación: "Investiga y estudia hasta que llegues a pensar como nosotros". "Después de esto, cada uno se fue a su casa." Aparentemente no ha ocurrido nada, la agitación se ha controlado y el orden fue establecido. Sin embargo, se ha producido una grieta profunda. Los guardias contestaron en su momento "—¡Nunca ha hablado nadie como lo hace ese hombre!". Jesús nos dice: "Si ustedes les dicen a otros que son mis seguidores, yo también le diré a mi Padre, que en verdad lo son. Pero si ustedes le dicen a la gente que no son mis seguidores, yo también le diré a mi Padre que no lo son.", Mt 10:32-33

Carlos Scott

Foto Gilbert Lennox

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