En armonía con la creación
El ser creados a imagen y semejanza de Dios significa que somos llamados a reflejar y representar su imagen. Implica vivir en relación con El, en armonía en medio de la comunidad y en una correcta relación con la naturaleza en administrar y cuidar la tierra. Lo contrario es vivir sin relación. El ser humano al querer levantarse como un Dios no encuentra su propia humanidad, separado de su prójimo refleja las injusticias sociales, las guerras, asesinatos, abusos de todo tipo y al estar separado de la creación evidencia que los recursos naturales se van destruyendo y se contaminan a un ritmo catastrófico. La causa principal de estas separaciones es vivir separados de Dios y lejos de su ideal. Dios es amor, nos ama y nos invita a vivir en su ideal. Nos da una nueva oportunidad para reflexionar, cambiar y vivir un nuevo tiempo para celebrar la vida.
"Sin embargo, con gran esperanza, la creación espera el día en que será liberada de la muerte y la descomposición, y se unirá a la gloria de los hijos de Dios. Pues sabemos que, hasta el día de hoy, toda la creación gime de angustia como si tuviera dolores de parto; y los creyentes también gemimos—aunque tenemos al Espíritu Santo en nosotros como una muestra anticipada de la gloria futura—porque anhelamos que nuestro cuerpo sea liberado del pecado y el sufrimiento. Nosotros también deseamos con una esperanza ferviente que llegue el día en que Dios nos dé todos nuestros derechos como sus hijos adoptivos, incluido el nuevo cuerpo que nos prometió. Recibimos esa esperanza cuando fuimos salvos. (Si uno ya tiene algo, no necesita esperarlo; pero si deseamos algo que todavía no tenemos, debemos esperar con paciencia y confianza)." Romanos 8:18-30
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