La comunidad del Reino de Dios o la iglesia es un lugar para la comunión, colaboración, cooperación. Todos estamos llamados a colaborar. La colaboración y cooperación encuentra su fuente en la comunión de unos con otros. Es cuando existe un amor mutuo, porque los miembros se sienten llamados a caminar juntos, compartir la vida en el llamado de Dios. Es transformar la sociedad local hasta lo último de la tierra con los valores del Reino de Dios. La colaboración sin la comunión puede ser algo penoso y pesado porque le faltaría el principal ingrediente que es la experiencia común del amor. La comunión y cooperación es el reconocimiento que somos un solo cuerpo, un solo pueblo llamado por Dios a ser fuente de amor y de paz. Es una experiencia de apertura y confianza. Es un don del Espíritu Santo. La comunidad del Reino de Dios es ante todo un lugar de comunión. Se debe dar lugar a la relación porque tenemos una fe trinitaria, una fe relacional, una fe comunitaria. Lo primero que compartimos es la fe y de ahí sale la colaboración práctica y cooperación de la obra. Cuando una comunidad es solo un lugar de trabajo, está en peligro. Se pierde el sabor, la esencia, el gusto y la alegría. Dios quiere que celebremos el encuentro, la vida, la relación unos con otros que despierta esta conciencia de comunión.

La iglesia tiene un rol profético. Somos llamados a trabajar a favor de la justicia en la sociedad, Sal 82:1-4, Am 5:21-24, Lc 3:10-14, 4:18-21, Mt 11:4-6, Ef 5:11. El pueblo de Dios esta llamado a defender la causa de los pobres y necesitados en cada nación y en todo el mundo no como si fuera la tarea primaria o exclusiva de la iglesia, sino como un testimonio de que la redención y la santidad incluyen todas las áreas de la vida. La manera en como se tratan a los pobres y "a todos aquellos que no tienen poder social" es una prueba de la justicia en cualquier sociedad o sistema político. La iglesia debe servir como conciencia moral, marcando y planteando cuestiones de justicia, rectitud, integridad . La iglesia es profética cuando es una comunidad que revela la naturaleza del reino, la mente y el carácter de Jesucristo. La dimensión profética y la dimensión evangelizadora de las buenas nuevas están entrelazadas en la vida y testimonio de la comunidad del Reino, la iglesia. Incluye la proclamación del evangelio de manera que toda persona tenga la oportunidad de responder con fe en obediencia a Jesús y colaborar en la edificación de la comunidad cristiana. Esta comunidad es una nueva realidad social donde es desafiada a mostrar la semejanza a Cristo trabajando por la justicia y la paz en el mundo

El servicio es el verdadero modelo para el ministerio y para las relaciones entre los seguidores de Jesús. El Señor hablo acerca del poder y nos pide que vivamos el poder de una manera diferente, Mt 20:20-28, 23:1-12, Mr 9:35-37, Lc 9:46-48, 22:24-27, Jn 13:12-17, Fil 2:1-11, 1 Co 1:18-31. El concepto que tiene el mundo sobre el poder no debe operar dentro de la iglesia. El poder en la iglesia no es cuestión de posición, jerarquía o autoridad: es cuestión de función y servicio. La grandeza del cristiano no se relaciona con su cargo, estatus, títulos o reputación, sino se basa en como funciona como siervo.