jueves, 26 de junio de 2025

“Nadie parece darse cuenta de los errores que comete. ¡Perdóname, Dios mío, ¡los pecados que cometo sin darme cuenta!”, Salmos 19:12

  La verdad en la espiritualidad 

¿Cómo sueles reaccionar cuando te confrontan con la verdad?

“El Señor le dio el siguiente mensaje a Jonás, hijo de Amitay: «Levántate y ve a la gran ciudad de Nínive. Pronuncia mi juicio contra ella, porque he visto lo perversa que es su gente»”, Jon 1:1-2

El texto de 2 Reyes 14:25 ubica a Jonás en el reino del Norte, el más rico y poderoso de los dos, de un reino dividido, cuya capital era Samaria. Muestra a Jonás como un patriota y con sentimientos nacionalistas que insta a su rey Jeroboam II, a seguir una política de expansión para restablecer las fronteras de Israel.

Dios le envía a predicarles a los Asirios que son los enemigos de su pueblo y conocidos por su maldad y crueldad. Para Israel, Nínive (cerca de Mosul, Irak) es símbolo de lo malo y perverso. Ahora Dios lo manda para allá. Debe levantarse: Ir y predicar contra ella. Este hecho, el ir hacia ellos es señal de que Dios también es Dios de Nínive. No está excluida de su amor y compasión.

A Jonás se lo describe como el “hijo de Amitay” que quiere decir “hijo de la verdad”. Es una persona que se cree en posesión absoluta de la verdad, pero cuando la verdad de Dios lo confronta lo que hace es huir: “Entonces Jonás se levantó y se fue en dirección contraria para huir del Señor.”, Jon 1:3

Ser parte del Pueblo de Dios implica no solo privilegios sino responsabilidades

Nuestra oración: “Nadie parece darse cuenta de los errores que comete. ¡Perdóname, Dios mío, ¡los pecados que cometo sin darme cuenta!”, Salmos 19:12

Carlos Scott

Foto Gilbert Lennox

miércoles, 25 de junio de 2025

Orar y anhelar un futuro diferente

 La espiritualidad en el crecimiento del Reino de Dios

¿Cómo crece el Reino de Dios? ¿Qué significa orar y pedir que ¡VENGA TU REINO!?

Jesús nos desafía a pensar en el Reino de Dios. Es la esfera donde se reconoce su soberanía y autoridad para reinar. Jesús avanzo por medio de la oración. En la oración pedimos ¡VENGA TU REINO! y declaramos un nuevo presente que anhelamos para la vida humana, Is 35:5-7.

El Reino de Dios es una concreción histórica que trasciende los límites de la historia y es misterio. Se lo explica por medio de comparaciones y metáforas del saber popular

"El Reino de Dios se desarrolla desde lo pequeño a lo grande, de lo sencillo a lo completo, de lo familiar y cercano a lo social y distante. Hablamos de un reino que crece sin protagonismos y sin la pompa de los célebres"

Sabiendo que Dios reinará en plenitud nuestra práctica de la fe consiste en ser persistentes en orar y anhelar un presente diferente. Se nos llama a vivir con esperanza, perseverar y ser tenaces.

Para extender el Reino de Dios en las naciones y derrotar el mal tenemos que dedicarnos a la oración. No es magia y no siempre se hace realidad lo que pedimos. No se trata de algo que nosotros hacemos, sino es lo que Él hace en su tiempo y forma. Sin la oración nos agotamos.

Cuando oramos nos enfocamos en Dios y en lo que Él hará. La oración nos da descanso, trae esperanza, humildad y fortaleza. Nos enfocamos en sus recursos, su provisión y su fidelidad.

“Por medio de la oración Dios hace lo que solo Él puede hacer. En las situaciones más desesperadas el quebranta el falso dominio del enemigo, trae luz espiritual e infunde vida para una transformación social duradera."

"Dios usa la oración para cambiarnos a nosotros y para cambiar el futuro”. Nuestras oraciones son tenidas en cuenta, llegan a su presencia y Dios no las pasa por alto, Ap. 8:1-5. La oración marca un nuevo presente anhelado y forman el futuro.

Carlos Scott

Foto Gilbert Lennox

lunes, 23 de junio de 2025

¿Cómo afecta mi vida cuando me encuentro ante la santidad de Dios?

 La espiritualidad en la santidad

¿Puede la santidad alejarnos de otras personas, abandonar el amor, la misericordia y descalificar a otros?

"¡Yo vi al Señor el año que murió el rey Uzías!", Isaías 6:1-8

Isaías fue un profeta del Antiguo Testamento que fue enviado a un duro trabajo: predicar y profetizar a la rebelde nación de Judá. En los capítulos iniciales de Isaías hay una denuncia directa del estado del pueblo y la sociedad de su época. El profeta está inmerso en esta realidad y no aparte de la misma. Son estos momentos donde necesitamos una renovada visión del Señor

Isaías tuvo una visión de la santidad de Dios. La descripción de la imagen de Dios en medio de su gloria es impresionante. Había poderosos serafines y "En gran coro antifonal cantaban: ―Santo, Santo, Santo es el Señor Todopoderoso; toda la tierra está llena de su gloria.", Is 6:1-3

La visión lo lleva a experimentar una profunda angustia por su condición humana. La palpable santidad de Dios lo lleva a mirar su propia vida – no a su vecino, no a su iglesia - sino al mismo Isaías. Su angustia radica en que ve su propio pecado que lo lleva a buscar confesión y purificación. Antes que Isaías fuese enviado por Dios, necesitaba un encuentro con la santidad de Dios.

“Santo” significa “consagrado o apartado”, pero esto no significa que debía vivir dándole la espalda a su gente. “Isaías es humano y se encuentra en el mismo nivel que otros seres humanos. El profeta se coloca al lado de sus compatriotas y nunca en una posición de superioridad. Asume el problema del pueblo como algo propio, no se excusa y no se lava las manos”.

Isaías entiende el estado de su alma a la luz de la santidad de Dios, experimenta el perdón de Dios y reconoce que no debe vivir ajeno a lo que le pasa al otro. Isaías está listo para ser enviado.

Para pensar: ¿Cómo afecta mi vida cuando me encuentro ante la santidad de Dios? ¿Solemos examinarnos a nosotros mismos antes de mirar a otros? ¿Solemos colocarnos a favor de otras personas cuando enfrentan injusticias o terminamos colocándonos aparte? ¿Nos consideramos responsables de los problemas que vive la sociedad, la iglesia y asumimos nuestra culpa?

Carlos Scott

Foto Gilbert Lennox

domingo, 22 de junio de 2025

Tres Rasgos de un Díscípulo en tiempos difíciles | Andrés Pérez | La Par...

Serenidad y tranquilidad

 La reflexión en la espiritualidad

"Puedo terminar este libro diciendo que ya todo está dicho. Todo lo que debemos hacer es alabar a Dios y obedecerlo. Un día Dios nos llamará a cuentas por todo lo que hayamos hecho, tanto lo bueno como lo malo, aunque creamos que nadie nos vio hacerlo.", Ec 12:13-14

En todo el mundo nos estamos despertando con una nueva realidad. Hay incertidumbre y ansiedad.

La soberbia ha perdido vigencia, nos damos cuenta de nuestra debilidad y el poco control que realmente tenemos. 

La fragilidad de la vida nos ayuda a levantar nuestra mirada. Lo importante son las decisiones que tomamos en cuanto a cómo vivir ahora, lo que importa y lo que no. 

Buscamos un tiempo de serenidad y tranquilidad. El amor de Dios es perfecto, cierto y completo y su perfecto amor nos ayuda a echar fuera el temor. 

En las manos de Dios podemos descansar porque en su amor podemos vivir y confiar. 

Nuestra oración: "Enséñame a vivir de tal manera que el mañana no tenga que reprocharme el ayer"

Carlos Scott 

Foto Gilbert Lennox

sábado, 21 de junio de 2025

Justicia, Misericordia y Humildad

La espiritualidad basada en la verdad 

Deitrich Bonhoeffer expresó: “Guardar silencio frente a la maldad es la maldad en sí misma. Dios no nos considerará sin culpa. No hablar, es hablar. No actuar, es actuar”. 

El profeta Miqueas nos recuerda: “¡Ya se te ha declarado lo que es bueno! Ya se te ha dicho lo que de ti espera el Señor: Practicar la justicia, amar la misericordia, y humillarte ante tu Dios”, Mi 6:8. 

Miqueas responde con un duro mensaje sobre lo que es el verdadero culto a Dios. Es una vida caracterizada por tres profundos elementos: Justicia, Mishpat en hebreo; Misericordia, Chesed; y Humildad.

La Mishpat “justicia” es en esencia liberadora y salvífica. Enfatiza la acción, es dar lo que corresponde, es poner en orden las cosas. Se refiere a la justicia restaurativa. En el Antiguo Testamento, el hacer Mishpat tenía que ver con ocuparse de la viuda, el huérfano, el pobre y el extranjero que eran sectores marginales de la sociedad de esa época. Su base y fundamento son el amor y la compasión. 

Chesed, “misericordia”, es una actitud del corazón, de compasión, bondad y gracia. Representa el deseo de compartir, dar todo de sí mismo de la cual fluye una vida de justicia. Una vida sin esa virtud hacía que cualquier intento de culto a Dios fuera un sacrificio vacío o una pérdida de tiempo. 

“En efecto, el pueblo de Dios, que quiere adorar en verdad, cualquiera sea el cántico que cante, está llamado para hacer justicia (poner orden en la vida y las cosas), amar la misericordia (vivir con profunda compasión), y caminar humildemente delante de Dios. El culto, repensado bajo esta mirada, es lo que Dios quiere y lo que el mundo necesita desesperadamente" 

Es vital comprometernos a trabajar y apoyar los derechos humanos mediante la defensa de la igualdad y libertad para todos. Estar dedicados a defender y hablar por los que no tienen voz ante la violación de sus derechos humanos, Pr 31:8-9 

Que hoy sepamos acudir en auxilio de nuestro prójimo, cualquiera sea su origen étnico, creencia o procedencia. ¡Sin demora y sin reservas de ningún tipo! 

Carlos Scott

Foto Gilbert Lennox

viernes, 20 de junio de 2025

Fin de Semana de Misiones Go! | Plenaria 2: Una iglesia en misión

La sabiduría nos está llamando y esta llamada es de Dios

 La espiritualidad en la sabiduría

¿Cuál es tu fuente en la que buscas sabiduría? ¿Cuál es el llamado de la sabiduría para el mundo de hoy?

"¡La sabiduría está llamando! ¡Gritando está la experiencia! Se para a la orilla del camino o a la mitad de la calle, para que todos puedan verla. Se para junto a los portones, a la entrada de la ciudad, y grita a voz en cuello: «Gente de todo el mundo, ¡a ustedes estoy llamando!, ... pues voy a decirles algo importante; no me gusta la mentira ni tampoco la hipocresía, siempre digo la verdad", Pr 8:1-8

La palabra de Dios nos habla sobre la sabiduría como algo de cada día. Es algo práctico, una calidad de vida a la cual podemos acceder. El Dios de toda la verdad y sabiduría quiere que seamos sabios en cada decisión que hacemos. 

Ser sabio significa tratar de discernir las opciones que Dios quiere que tomemos cada día. La sabiduría es el discernimiento para ver las diferencias entre mayores y menores problemas, también es discernir entre lo bueno y lo mejor. La sabiduría nos está llamando y esta llamada es de Dios. No es un susurro o un secreto, más bien, grita y llama.

Es un llamado a vivir con prudencia y que podamos planear, reaccionar, prosperar y agradar a Dios. Se requiere humildad para no caer en el orgullo o la arrogancia; se trata de hacer lo que es justo y correcto. Hace que otros nos tengan confianza. 

Ser sabio, es más que ser inteligente. Ser sabio implica el discernimiento aplicando correctamente el conocimiento.

La sabiduría es pura, pacífica, bondadosa, llena de compasión y de buenos frutos, imparcial y sincera, Stg 3:17. "Si a alguno de ustedes le falta sabiduría, pídala a Dios, y él se la dará, pues Dios da a todos generosamente sin menospreciar a nadie", Stg 1:5 

Carlos Scott

Foto Gilbert Lennox

jueves, 19 de junio de 2025

“Tu reino es un reino eterno, tu dominio permanece por todas las edades”, Salmo 145:13

La espiritualidad que permanece

"Te exaltaré, mi Dios y Rey, y alabaré tu nombre por siempre y para siempre. Te alabaré todos los días; sí, te alabaré por siempre. ¡Grande es el Señor, el más digno de alabanza! Nadie puede medir su grandeza. Que cada generación cuente a sus hijos de tus poderosos actos y que proclame tu poder. Meditaré en la gloria y la majestad de tu esplendor, y en tus maravillosos milagros. Tus obras imponentes estarán en boca de todos; proclamaré tu grandeza. Todos contarán la historia de tu maravillosa bondad; cantarán de alegría acerca de tu justicia.", Salmo 145 1-7

La vida está en constante movimiento, y es difícil predecir qué tendencias van a durar y cuáles serán momentáneas. La palabra de Dios tiene una constante: “Tu reino es un reino eterno, tu dominio permanece por todas las edades.”, Salmo 145:13. 

Esta alabanza de adoración escrita por David le recordaba al pueblo la grandeza de Dios e invitaba a "cada generación a celebrar sus obras y proclamar su grandeza para que todo el mundo le conozca"

En la vida del pueblo, este Salmo era recitado tres veces al día y se convertía en una realidad al hablar del esplendor de la gloria del Señor, de su poder, fidelidad y bondad. 

Meditaban en sus obras maravillosas: Dios es bueno, está cerca, nos cuida, atiende nuestro clamor, es generoso, sostiene al agobiado y levanta al caído. El Señor nos da alimento, nos sacia con su favor y se compadece de su creación. Es justo, clemente y compasivo, lento para la ira y grande en amor.

Todo esto nos recuerda quién es Dios, a diferencia de otros reinos y gobiernos terrenales. Él es siempre compasivo y su reino durará por siempre

En medio del constante cambio Dios permanece fiel. Entonces, nuestro servicio y entrega valen la pena. 

Carlos Scott

Foto Gilbert Lennox

viernes, 13 de junio de 2025

Una manifestación de servicio y entrega

 La espiritualidad en la adoración

"¡Canten al Señor una nueva canción! ¡Que toda la tierra cante al Señor! Canten al Señor, alaben su nombre; cada día anuncien las buenas noticias de que él salva. Anuncien sus gloriosas obras entre las naciones; cuéntenles a todos las cosas asombrosas que él hace.", Salmo 96:1-3

La palabra gloria generalmente se la asocia con esplendor, magnificencia, grandeza, renombre y reputación. Implica reconocimiento por haber hecho algo importante o cubrirse de gloria cuando se consigue fama por una acción determinada. 

El Salmo 96 nos habla de proclamar su gloria y maravillas entre las naciones. Dios quiere ser reconocido y alabado por todos los pueblos. Que le den gloria a su nombre. 

El salmo nos recuerda que el carácter y el estilo de vida del pueblo de Dios, debe reflejar el carácter y los atributos de Dios – su gloria – en el mundo. 

Es la gloria del amor, una manifestación de servicio y entrega. Es misericordia y verdad. Es la gloria de servir a todos, ser pequeños, humildes. La majestad y la belleza se manifiestan de una manera diferente, Is 52:13-15; 53

Su pueblo está llamado a alabar, adorar y proclamar su justicia, su amor inagotable, santidad y fidelidad. “Que se diga entre las naciones: ¡El Señor es Rey!".

Carlos Scott

Foto Gilbert Lennox

"Vengan a ver"

  El seguimiento en la espiritualidad  Juan el Bautista se encontraba con dos de sus discípulos y al ver pasar a Jesús les dijo “¡Aquí tiene...