domingo, 2 de julio de 2023

Imparcialidad

 Equidad

“Al multiplicarse los creyentes rápidamente, hubo muestras de descontento. Los creyentes que hablaban griego se quejaban de los que hablaban hebreo diciendo que sus viudas eran discriminadas en la distribución diaria de los alimentos”, Hch 6:1

La ayuda a los necesitados llego a ser una práctica diaria de la iglesia naciente. A medida que la iglesia crecía surgió una desigualdad entre los griegos o helenistas que eran los judíos que se habían criado lejos de Palestina y los hebreos de Palestina cuya lengua era el arameo, Estos últimos se consideraban mejores que los de lengua griega y el descontento surgido fue por la injusticia en la distribución de alimentos. La solución fue buscar y elegir personas que estén llenos del Espíritu y de sabiduría para servir en esta tarea. Los creyentes eligieron a personas de la cultura griega o helenista y se les dio la autoridad de administrar los recursos. La visión que está detrás de todo esto es la que deriva del pentecostés. El Espíritu Santo ha traído el tema de la importancia del pluralismo y la participación de todos los sectores culturales y sus respectivas lenguas. El Espíritu Santo nos desafía a ser inclusivos, es poder nivelador destructor de todo privilegio y que todas las voces sean escuchadas. Nos llama a que pueda haber equidad donde no debe prevalecer una lengua o cultura sobre la otra. Al abrirse a los griegos o helenistas la comunidad se transformó en un puente para la misión entre los gentiles o paganos. El futuro de la iglesia estaba en aquellos griegos que habían sido marginados. Este acontecimiento amplio la misión de la iglesia. El Espíritu Santo llama constantemente a la iglesia a una nueva obediencia y junto con esto nos abre un nuevo camino.

Carlos Scott

sábado, 1 de julio de 2023

No ideal

 La comunidad real

“Entonces Pedro le dijo: «Ananías, ¿por qué has permitido que Satanás llenara tu corazón? Le mentiste al Espíritu Santo y te quedaste con una parte del dinero. La decisión de vender o no la propiedad fue tuya. Y, después de venderla, el dinero también era tuyo para regalarlo o no. ¿Cómo pudiste hacer algo así? ¡No nos mentiste a nosotros sino a Dios!». En cuanto Ananías oyó estas palabras, cayó al suelo y murió. Todos los que se enteraron de lo sucedido quedaron aterrados. Después unos muchachos se levantaron, lo envolvieron en una sábana, lo sacaron y lo enterraron”, Hch 5:3-6

Lucas nos describe una iglesia con una bella vida espiritual, pero no ideal. La comunidad del Reino de Dios es un conjunto de seres humanos débiles y pecadores donde mora el Espíritu Santo. En la iglesia de Jerusalén también había otros conflictos. “Al multiplicarse los creyentes rápidamente, hubo muestras de descontento. Los creyentes que hablaban griego se quejaban de los que hablaban hebreo diciendo que sus viudas eran discriminadas en la distribución diaria de los alimentos”, Hch 6:1. Ser comunidad es un desafío profundo porque se nos llama a ser una señal del reino venidero, cuando no habrá más necesitados, donde habrá paz y justicia. La misión incluye dar una muestra real, aunque imperfecta del futuro que Dios ha de traer. Esta demostración no solo se da en las vidas personales, sino también en la vida comunitaria de la iglesia. Somos llamados y desafiados a mostrar una esperanza genuina. El pecado puede estar presente cuando no somos capaces de ver la presencia del Espíritu Santo. Ananías y Safira le mintieron al Espíritu Santo y esto los llevo a la muerte. Lo cierto es que seguir a Jesucristo es algo para tomarlo con seriedad y profundidad. Si decimos que todo lo que tenemos es de Dios y luego no ayudamos o se lo negamos a los hermanos necesitados, es burlarnos de Dios y somos infieles a su misión. Somos la comunidad del Espíritu Santo en palabra y obra.

Carlos Scott


viernes, 30 de junio de 2023

Ser creíbles

 Personas, apariencias y máscaras

"Todos los seguidores de Jesús tenían una misma manera de pensar y de sentir. Todo lo que tenían lo compartían entre ellos, y nadie se sentía dueño de nada... Entonces ellos lo repartían y le daban a cada uno lo que necesitaba. Esto también lo hizo José, pero los apóstoles le decían Bernabé, que significa «El que consuela a otros” … Había cierto hombre llamado Ananías quien, junto con su esposa, Safira, vendió una propiedad; y llevó solo una parte del dinero a los apóstoles, pero afirmó que era la suma total de la venta. Con el consentimiento de su esposa, se quedó con el resto”, Hch 4:32-36, 5:1-2

En la comunidad de fe había contribuciones a los necesitados que eran voluntarias y continuas. Lucas nos describe a una persona llamada Bernabé y nos ofrece un ejemplo concreto de lo que significaba ser generoso. Seguidamente nos ofrece otro ejemplo y es el caso de Ananías y Safira que se caracterizaron por engañar a la comunidad de fe. Ellos vendieron una propiedad y no tenían obligación de dar su dinero, pero pretendiendo que estaban entregando todo retuvieron una parte de esta. El resultado fue que ellos murieron por haber mentido al Espíritu Santo y darle lugar a Satanás. El pecado no está en dar o no dar, sino en la mentira y esta mentira no es solo ante la comunidad de fe sino ante Dios. Mentir a Dios y a la comunidad no se puede tomar a la ligera. Es algo serio y requiere honestidad. Mentimos muchas veces porque hemos perdido la costumbre de decir la verdad. Justo L Gonzalez lo expresa de esta manera: “Mentimos a la comunidad porque en medio de ella la mentira y la apariencia han venido a ocupar el lugar del amor y la verdad”. Vivir en la apariencia y luego en la mentira es tratar de mostrar lo que realmente no somos. Vivir intentando simular o fingir una cosa cuando realmente soy otra no puede llevarnos en un buen camino. Somos llamados a ser una comunidad del Espíritu Santo que nos conduce a toda verdad y ser creíbles. “Cuando venga el Espíritu Santo, él les dirá lo que es la verdad y los guiará, para que siempre vivan en la verdad”, Jn 16:13. ¡Señor ayúdanos!

Carlos Scott


jueves, 29 de junio de 2023

Decisiones

 Audacia y coraje

“Cuando llegaron ante la Junta Suprema, el jefe de los sacerdotes les dijo: —Ya les habíamos advertido que no enseñaran más acerca de ese hombre Jesús, pero no nos obedecieron. A todos en Jerusalén les han hablado de Jesús, y hasta nos acusan a nosotros de haberlo matado. Pedro y los demás apóstoles respondieron: —Nosotros primero obedecemos a Dios, y después a los humanos”, Hch 5:27-29

Hay determinados momentos y circunstancias difíciles que nos llevan a tomar una decision final. En el caso de los apóstoles fue declarar ante el Sanedrín o Junta Suprema lo que creían, a quien seguían y donde estaba puesta su lealtad. Ellos tendrían que haber callado según las órdenes recibidas de las autoridades religiosas, pero siguieron compartiendo el mensaje de Jesús de Nazaret entre el pueblo. Su respuesta ante la Junta Suprema fue determinante: “Nosotros primero obedecemos a Dios, y después a los humanos”. La autoridad absoluta es de Dios y no le pertenece a ninguna autoridad humana. La misión está bajo el signo del coraje, la verdad, de la firmeza y un testimonio que a veces incomoda y provoca. Se trata de Jesús y no de una organización, institución o cualquier otra etiqueta. Las consecuencias fueron que azotaron a los discípulos y luego los soltaron. La misión es siempre arriesgada.

Carlos Scott 

miércoles, 28 de junio de 2023

Coraje

 Poder en la dificultad

“Llamaron a los apóstoles y mandaron que los azotaran. Luego les ordenaron que nunca más hablaran en el nombre de Jesús y los pusieron en libertad. Los apóstoles salieron del Concilio Supremo con alegría, porque Dios los había considerado dignos de sufrir deshonra por el nombre de Jesús. Y cada día, en el templo y casa por casa, seguían enseñando y predicando este mensaje: «Jesús es el Mesías», Hch 5:40-42

Pedro y Juan predicaban el evangelio. No lo predicaban para provocar celos, sino para ser fieles a lo que el Señor les había encomendado. Los dirigentes se concentraban en mantener su poder y ellos utilizaron todo tipo de legalismo formal para afirmarlo. Si los apóstoles despertaron celos y envidia, no fue por culpa de ellos, sino por culpa de los poderosos que no estaban dispuestos a que se cuestionara su autoridad. Finalmente, el concilio ordeno que azotaran a los discípulos y que no hablaran más en el nombre de Jesús. Lo sorprendente fue que a pesar de ser azotados salieron con alegría, no se avergonzaron por proclamar a Jesús y compartir en quien habían creído. El castigo y las circunstancias adversas no les quito la alegría. Somos la comunidad del Espíritu Santo y podemos ser fortalecidos confiando en su poder. Encontramos la paz y la alegría que nos da la esperanza porque el perfecto amor hecha fuera todo temor. El perfecto amor de Dios por cada una de nuestras vidas nos hace más que vencedores. Estamos seguros, tranquilos y contenidos en ese amor que quita los temores y hay poder en medio de las dificultades. Ser testigo implica afirmar el valor que hay en seguir a Jesucristo. “En medio de todos nuestros problemas, estamos seguros de que Jesucristo, quien nos amó, nos dará la victoria total”, Ro 8:37

Carlos Scott

martes, 27 de junio de 2023

Hacer el bien

 Seguir y perseverar

“El sumo sacerdote y sus funcionarios, que eran saduceos, se llenaron de envidia. Arrestaron a los apóstoles y los metieron en la cárcel pública; pero un ángel del Señor llegó de noche, abrió las puertas de la cárcel y los sacó. Luego les dijo: «¡Vayan al templo y denle a la gente este mensaje de vida!», Hch 5:17-20

Las autoridades una vez más envían a la cárcel a los apóstoles y el motivo principal son los celos y la envidia. Seguidamente un ángel o mensajero los libera. Estos mensajeros o ángeles no dan señales de ser distintos de cualquier ser humano. La escritura nos dice: “No se olviden de recibir bien a la gente que llegue a sus casas, pues de ese modo mucha gente, sin darse cuenta, ha recibido ángeles”, He 13:2. Cuando las autoridades nuevamente se dan cuenta que Pedro y Juan están enseñando al pueblo los vuelven arrestar y los llevan ante el Concilio Supremo deseando matarlos. La persona que interviene es Gamaliel y permite que no sean condenados a la muerte. Pedro y Juan fueron castigados severamente con azotes y no todos salían vivos después de esto. La autoridades les dijeron “¡Les ordenamos estrictamente que no enseñaran nunca más en nombre de ese hombre!. En lugar de eso, han llenado a toda Jerusalén con la enseñanza acerca de él, ¡y quieren hacernos responsables de su muerte! Pero Pedro y los apóstoles respondieron: —Nosotros tenemos que obedecer a Dios antes que a cualquier autoridad humana.” Los discípulos fueron muy valientes y obstinados. No retrocedían antes las circunstancias adversas. En este tiempo debemos volver a pensar, orar y tener actitudes concretas que muestren que el seguimiento a la persona de Jesús se basa en la perseverancia. “En cuanto al resto de ustedes, amados hermanos, nunca se cansen de hacer el bien”, 2 Ts 3:13. “Así que no nos cansemos de hacer el bien. A su debido tiempo, cosecharemos numerosas bendiciones si no nos damos por vencidos”, Ga 6:9. “¡Tú guardarás en perfecta paz a todos los que confían en ti, a todos los que concentran en ti sus pensamientos!”, Is 26:3. “Pero nosotros no somos de los que se vuelven atrás”, He 10:39

Carlos Scott

lunes, 26 de junio de 2023

Movimiento

 Visión y determinación

“Cada día se agregaban al grupo más hombres y mujeres que creían en Jesús”, Hch 5:14

Los estudios que se han realizado sobre el crecimiento de la iglesia han verificado que solo cuando el número de iglesias se multiplica y se plantan nuevas iglesias, crece la proporción de creyentes dentro de la población total en una sociedad determinada. Una investigación sociológica parece sugerir que una vez que una comunidad de fe ha crecido hasta tener muchos miembros, la tasa de crecimiento bajará a menos que se formen nuevas comunidades o plantación de nuevas iglesias. La clave está en equipar y soltar a la gente confiándola a la obra del Espíritu Santo. Ver una sociedad y a las naciones transformadas con el evangelio implica la formación de nuevas comunidades que no dependen de edificios o estructuras institucionales. Si el crecimiento está limitado por las estructuras, propiedades o edificios estamos en un grave problema. La iglesia del nuevo testamento no estuvo limitada por estos factores. La iglesia no es un edificio. Estar más cerca del templo no significa estar más cerca de Dios. La iglesia es la gente. Donde hay dos o tres el Señor ya está presente y hay un mayor involucramiento por parte de todos. El mayor obstáculo para que la iglesia crezca es la falta de visión y determinación en continuar con un movimiento donde se forman nuevas comunidades de fe.

Carlos Scott


domingo, 25 de junio de 2023

Salvación, sanidad y liberación

 Un Dios activo

“Los apóstoles hacían muchas señales milagrosas y maravillas entre la gente. Y todos los creyentes se reunían con frecuencia en el templo, en el área conocida como el pórtico de Salomón; pero nadie más se atrevía a unirse a ellos, aunque toda la gente los tenía en alta estima. Sin embargo, cada vez más personas—multitudes de hombres y mujeres—creían y se acercaban al Señor. Como resultado del trabajo de los apóstoles, la gente sacaba a los enfermos a las calles en camas y camillas para que la sombra de Pedro cayera sobre algunos de ellos cuando él pasaba. Multitudes llegaban desde las aldeas que rodeaban a Jerusalén y llevaban a sus enfermos y a los que estaban poseídos por espíritus malignos, y todos eran sanados”, Hch 5:12-16

Lucas nos da un resumen sobre los milagros que ocurrían en la comunidad y como cada vez más personas creían en el Señor. Al parecer los que no se unían a ellos eran los poderosos que estaban celosos y temían perder su autoridad sobre el control del pueblo. Este sector religioso solía ejercer presión sobre sus miembros impidiendo que se acerquen a los discípulos del Señor. El resultado fue lo opuesto dado que las multitudes llegaban desde las aldeas y la gente era sanada. Podemos decir que los seguidores de Jesús seguimos creyendo en estos milagros. Dios no se ha limitado en extender su mano para que encontremos salvación, sanidad y liberación de toda opresión. Es clave entender que Dios llama a las comunidades de fe a seguir experimentando lo sobrenatural. Puede haber personas que buscan desalentar la esperanza de un cambio profundo en el orden presente, pero los creyentes en Jesucristo confiamos en un nuevo orden. La esperanza nos da tenacidad y perseverancia. Creemos en un Dios activo. Vivimos la fe confiando que Dios interviene en nuestras vidas y en la historia.  

Carlos Scott

sábado, 24 de junio de 2023

Modelos

 El paradigma de Pentecostés

“Todos fueron llenos del Espíritu Santo … “, Hch 2:4. "Cada vez más personas—multitudes de hombres y mujeres—creían y se acercaban al Señor”, Hch 5.13-14

El concepto de paradigma es utilizado comúnmente como sinónimo de “ejemplo” o para hacer referencia en caso de algo que se toma como “modelo”. El paradigma de Pentecostés nos habla de estar ampliando las fronteras y los círculos de influencia, “pero recibirán poder cuando el Espíritu Santo descienda sobre ustedes; y serán mis testigos, y le hablarán a la gente acerca de mí en todas partes: en Jerusalén, por toda Judea, en Samaria y hasta los lugares más lejanos de la tierra”, Hch 1:8. Nos desafía a traer el cielo a la tierra. Si solamente nos enfocamos en el “más allá” y nos alejamos del “más acá”, la consecuencia es que nos alejamos de los sufrimientos y angustias de la gente. "¿Por qué están aquí parados, mirando al cielo?”, Hch 1:11. Mientras permanezcamos acá, el Señor nos llama a involucrarnos en la misión. Pentecostés representa el derramamiento del Espíritu Santo, es una visitación divina. El Espíritu descendió sobre todos y no sobre algunos. Es un Espíritu nivelador, destructor de cualquier privilegio. Es un Espíritu multiétnico, multilingüe, multicultural. Se proclaman las maravillas de Dios. “¡Y todos oímos a esta gente hablar en nuestro propio idioma acerca de las cosas maravillosas que Dios ha hecho!”. Se experimenta el poder sobrenatural de Dios. “Los que creyeron lo que Pedro dijo fueron bautizados y sumados a la iglesia en ese mismo día, como tres mil en total”, Hch 2:41. Es un Espíritu que no se burla, ni descalifica a los demás. Se alegra en la multiforme gracia de Dios. Es un Espíritu que llama a la comunidad de fe a caminar, ir más allá, más lejos. Invita a la comunidad del Reino de Dios a revisar y repensar su estructura. Lo importante para el Espíritu Santo no es la estructura de la iglesia sino la misión. Andar en el Espíritu es caminar en unidad y celebrar la fiesta de la diversidad. ¡Bienvenido Espíritu Santo! “Y cada día el Señor agregaba a esa comunidad cristiana los que iban siendo salvos”, Hch 2:47

Carlos Scott

viernes, 23 de junio de 2023

Señales

 Un corazón y un alma

“Y la multitud de los que habían creído era de un corazón y un alma; y ninguno decía ser suyo propio nada de lo que poseía, sino que tenían todas las cosas en común”, Hch 4:32

Lo que sucedió en esos días es el resultado de la predicación de Pedro en Pentecostés. Fueron días que el Espíritu Santo llevo a la comunidad del Reino de Dios a manifestar su carácter. Dios nos vuelve a desafiar en la actualidad al pensar que formamos parte de estos “últimos días” y no importa cuán largos sean los mismos. Lo que ocurrió con la resurrección de Jesucristo y el derramamiento del Espíritu Santo es que los postreros días han comenzado. Somos llamados a ser una señal y anticipo del reino venidero. Un Reino que se caracteriza por el amor, la paz, la abundancia y la justicia. Lo que se describe no es un ideal, sino la señal concreta de lo que significa ser una comunidad de fe, esperanza y amor. La finalidad de la iglesia es practicar el amor y expresar la nueva vida en el Espíritu. “Conocemos lo que es el amor verdadero, porque Jesús entregó su vida por nosotros. De manera que nosotros también tenemos que dar la vida por nuestros hermanos. Si alguien tiene suficiente dinero para vivir bien y ve a un hermano en necesidad, pero no le muestra compasión, ¿cómo puede estar el amor de Dios en esa persona? Queridos hijos, que nuestro amor no quede solo en palabras; mostremos la verdad por medio de nuestras acciones. Nuestras acciones demostrarán que pertenecemos a la verdad, entonces estaremos confiados cuando estemos delante de Dios”, 1 Jn 3:16-19. 

Carlos Scott

jueves, 22 de junio de 2023

Generosidad

 Cuestiones económicas

“No había necesitados entre ellos”, Hch 4:34

Este relato trata sobre las cuestiones económicas en la vida de la iglesia primitiva. “No había necesitados entre ellos”¿Es una cuestión romántica, es real o es una visión ideal de la comunidad? Lo primero que observamos en los escritos de Lucas es la descripción de una comunidad que se alegra aumentando en número y que tiene la capacidad de responder a las necesidades de la gente como resultado de la obra del Espíritu Santo. “La gracia de Dios se derramaba abundantemente sobre todos ellos, pues no había ningún necesitado en la comunidad”, Hch 4:33-34. El texto hace referencia a Deuteronomio 15:4-11 donde dice “No deberá haber pobres en medio de ti, … no seas insensible ni tacaño ...  Da al pobre con generosidad, no de mala gana, porque el Señor tu Dios te bendecirá en todo lo que hagas. Siempre habrá algunos que serán pobres en tu tierra, por eso te ordeno que compartas tus bienes generosamente con ellos y también con otros de tu pueblo que pasen necesidad.” Lucas nos está diciendo que el don del Espíritu Santo nos debe llevar a ser una comunidad para los demás. Es el don de la misión que en este caso se manifiesta en ser generosos y es un aspecto fundamental de la vida de la iglesia. La comunión o koinonía nos debe proyectar en pensar en los demás y al pensar en los demás pensamos en los diferentes caminos que Dios está marcando para que su nombre sea exaltado y conocido en toda la tierra.

Carlos Scott

Manos a las piedras

  Recurrente "En nuestra ley, Moisés manda que a esta clase de mujeres las matemos a pedradas.", Jn 8:5 Lamentablemente los que su...